Persiguiendo a Morfeo

Pretendo estar a buenas con Morfeo
y la higiene del sueño sigo a ultranza,
quisiera hacer con él una alianza
que me evite dar vueltas, ¡qué mareo!

Con conquistar mi sueño fantaseo,
mas tengo ya perdida la esperanza;
y aunque haya decaído la confianza
ejecuto cualquier cambio que leo:

Apagar las pantallas más temprano,
meditar, suprimir la cafeína,
ajustarme a mi ritmo circadiano,
y un suplemento de melatonina.

Olvidar todo aquello que me enoja
y cambiar la luz blanca por la roja.

Confieso mi congoja:
un puticlub parece ahora mi casa
pero mi intento de dormir fracasa.




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Gracias por tu rápida intervención, apenas me ha dado tiempo a darle a enviar y ya has llegado. ¡Wow!
La musiquilla no podía faltar pero la he dejado en mi blog, si vas, verás qué marchuqui le he puesto.
Saludos.

 

Ese toque tecno le va como un traje hecho a medida, la poesía hilarante, la he leído también el el bloc, perdón, blog y me gusta mucho. Un saludo.

 

Jeje, qué bueno el poema y la estrofa final lo remata de manera genial . Felicidades y buenas noches, compañera

Va otra cancioncita de acompañamiento

 

No es por ser malo, pero si el insomnio produce estos versos: ¡que siempre sea día!.
Una abrazo Era.

Pd: me encantó el detalle de los atrapasueños en la imagen que acompaña el poema.