Guacamayxs

¿Cuántxs guacamayxs tendrá el universo?

Aquí y allá, hendiendo con sus alas una atmósfera.

De distintos tamaños y alimentos.

Ruidosxs, compañerxs, indiscretxs, amigxs.

¿Cuántxs?

Viajerxs del espacio universal

o interuniversal.


Caracas se llenó de guacamayxs

verdes,

azules y amarillxs.

Noviembre y Caracas no se llenó de cisnes negros. 2019.
Cesar el viejo. ​

 

Qué guapas se ven en tu poema

Grato leerte

 

Lo son. ¿Sabes? Es un fenómeno nuevo, de hace tal vez unos quince años para acá. Antes de eso, la única forma de ver un guacamayo en Caracas era en los parques zoológicos... encerradas, tristes, descoloridas.

Ahora hasta bandadas hay de ellas por ahí. Y existe como un pacto social no escrito de dejarlas tranquilas e incluso protegerlas. Hay gente que las atrae a sus casas ofreciéndoles frutas, solo por tenerlas de visita.

Gracias por hacerte presente. Comenzaba a pensar que a más nadie en este lugar les gustaban esos seres maravillosos. Un abrazo.

 

Ah, pues habrá que ponerles más comida ¿no? Jajaja.

Muchas gracias por venir.

 

Guaca que? Guacamayxs? Hehehe vas a tener que explicar de que especie son !! Yo tengo una amiga que les pone semillas de girasol y le llegan a su balcón, una belleza de aves la verdad. GRAXS por este momento poeta. Un abraso alto pana.

 

Mucha gente lo está haciendo. Girasol, cambur, frutas en general. Le han dado un colorido sonoro y visual muy especial a la ciudad ¿te has dado cuenta?

Yo crecí en una Caracas sin guacamayas ni guacamayos. Para ver algunx había que ir al Parque del Este o al Pinar. Entonces lxs veías ahí en esas jaulas, presxs y quietxs, casi silenciosxs. Daba dolor verlxs así. Nada como verlxs realengxs, libres, ruidosxs, cruzar los cielos de la ciudad, yendo a donde les viene en gana. Es un regalo natural.

Muchas gracias por haber venido, pana mío.

 

No me de las graxs pana mío !! Lo leo porque es garantía de buena poesía. Yo soy de esa misma caracas de la que hablas y además tengo un poemita por ahí dedicado a ellas. He tenido la fortuna de verlas comiendo frente a mi y hacen un escándalo del carajo pero vale la pena. Un saludo sincero estimado Cesar.

 

Son animales extraordinarios, sí. Hace algunos años en La Julia (puesto de guardabosques al que se llega subiendo al Pico de Naiguatá por El Marqués) vi otras aves que para los caraqueños eran práctivcamente desconocidas: Guacharacas. Pero no una o dos, había en aquella ocasión unas treinta o cuarenta de ellas. Se habían acostumbrado a vivir con los guardaparques, quienes hasta un corralito les habían hecho. Estaban tan "curtidas" que hasta le pedían comida a la gente, y llega a ese lugar mucha gente, ya que la subida es usada para hacer ejercicio por gran cantidad de personas.

La vida silvestre solo necesita una pequeña oportunidad en este trópico generoso y fecundo.

 

Y son un verdadero espectáculo. No sé cuántas habrán, pero mientras existan, se preserven en nuestro entorno, es toda una bendición.
Celebro que hayas presenciado su llegada, debe haber sido una sorpresa a los sentidos, contemplar tanto color en el cielo de Caracas.
Un abrazo!
Camelia

 

Pues, ahora están desapareciendo misteriosamente. Y no se lxs encuentra muertxs por ahí... o sea, ya alguien como que descubrió que son fáciles de atrapar y que se pueden vender a gente estúpida (estúpida en todos los sentidos posibles). Pobres pájaros, tener que lidiar, solo por ser hermosos, bullangueros y amigables, con estúpidxs bichxs que aparentan ser personas.

Muchas gracias por tu visita y tus palabras, compañera.

 

genial poema maje. hay que volarle verga a los zombies que se empeñan en quitarnos la alegría que dan esos jodidos guacamayos interestelares.

porque efectivamente, ¡no tiene precio la sonrisa que te sacan esos cabrones!

salud.

 

Esa sonrisa de la que hablas, la quieren privatizar, que la disfruten (mentira, no saben disfrutar de la poesía simple que es en sí mismo un guacamayo) únicamente los putos millonarios, encerrando a los pobres pájaros en jaulas... ¡Hay que ser un jodido enfermo de la mente para hacer eso, vale!

DE acuerdo contigo, bróder. Volarles verga hasta que nos dejen la vida en paz a nosotros y a los guacamayos, caballos, leones, elefantes, delfines... A propósito del tema, te comparto esta vieja canción inteligente que seguramente conoces:

​

Un abrazo, mi pana.

 

Libertad a los pájaros... Aunque también la libertad es jodida. Incluso para ellos.
abrazxs compañerx