Soneto strambóttico.

El reto, tantas veces postergado,
cumplir alguna vez con el soneto,
quiero, con este, con que me someto,
que, de una vez, por fin, quede zanjado.

Falta una sílaba a veces, o sobra,
para lograr correcto endecasílabo.
Hay veces que me queda larguisílabo
otras, alguna de ellas, me zozobra.

Parece que al terceto ya he llegado,
al menos llevo... ¡diez versos! escritos
y el tema, aún... no tengo bien cerrado.

Como concluya bien este terceto,
¿lo negarán las formas terminado
haya belleza, o no, en este soneto?

Por fin lo terminé, más me planteo…
¿he de escribir con tanto miramiento?
¡Por Bécquer, sé que no! ¡Valiente invento!
¡Me declaro estrambote y no soneto!


Pese a ser estrambote, por mi opción, a todos los que intentaron ayudarme, los que me asesoraron, los que me hicieron repasar la sinalefa, la diéresis, el hiato; los que me corrigieron los acentos en el endecasílabo, amigos generosos, va mi agradecimiento y a su labor meticulosa, mi reconocimiento... que no descarto, alguna vez, tratar de prosperar… y subir desde estrambote, hasta soneto.

 

Buenos días, Tamiz.
Acabo de leer tu soneto, ese que todos hemos hecho alguna vez imitando al de Violante (el que esté libre de soneto que tire el primer verso ) y está plagado de simpatía, eso sí. Por lo demás solo te voy a dejar aquí lo que se conoce como estrambote:

estrambote:

1. Conjunto de versos que se añade al final de un poema, especialmente de un soneto, para rematarlo, en general con tono irónico.

Así que disiento, pero un soneto en su conjunto no puede ser un estrambote.

Seguro que si vas puliendo aristas lo consigues antes de lo que canta un gallo. Sólo tienes que pasarlo un poco por el tamiz, y llegarás a ello. Aunque hay que pulir sobre todo los "larguisílabos"...
¡Ha sido divertido, por Bécquer! (Autor que precisamente no fue pródigo en sonetos... )
Yo hubiera dicho: ¡Por Lope, sé que no! ¡Valiente invento!, pero como el poema es tuyo eres muy libre de votar a bríos.

Un saludo muy cordial.

 

Hola, Eratalia:
Me defino como estrambote yo, por mis preferencias hacia el verso libre, no el soneto, el soneto es estrambótico en el sentido de hecho por capricho. Y he simulado una palabra en italiano que no existe (sería "dispari" no "strambottico" para que se corresponda al español)
Si incluyo a Lope en la expresión: ¡Por Becquer sé que no!... diría lo contrario de lo que quiero manifestar: me definiria más como soneto que como estrambote, me inclinaría más a la sujeción a la métrica clásica, que de ningún modo desprecio ni dejo de tener en cuenta, que a la libertad del verso de Bécquer. en definitiva, me definiría como soneto (Lope, las normas) y no como estrambote (Bécquer, el verso libre, ya que el estrambote escapa a la rigidez formal del soneto)

Ya sé, me he explicado como un libro cerrado... por eso esta aclaración. Saludos y gracias por tu presencia y comentario.

 

Estimado: si te refieres a Gustavo Adolfo Bécquer, este no practicaba el verso libre (cuyos inicios en nuestra lengua son un poco posteriores), y cuando hacía endecasílabos los hacía bastante buenos; sí era amigo de la plurimetría, la combinación de versos de distintos metros.
saludos

 

Este se puede decir que sí cumple las normas básicas del ritmo. Se puede hablar sobre gustos estéticos, por ejemplo no es aconsejable que se produzcan sinalefas en el acento en sexta por ejemplo aquí "haya belleza, o no, en este soneto?" "otras, alguna de ellas, me zozobra.". La mejora respecto al anterior es evidente.
Te aseguro que todos los esfuerzos a los que te lleva la métrica so muy aprovechables a la hora de escribir verso libre.

Permíteme que difiera en esa apreciación, Bécquer no escribe verso libre, sus poemas están asentados en ritmos métricos, te pongo el ejemplo de uno de los más famosos, se trata de un poema arromanzado conritmo endecasílabo (alejandrinos, heptasílabos o endecasílabos), nada que ver con el verso libre. Como ves todos sus versos son endecasílabos perfectos con acentos en sexta sílaba (el más dudoso es el undécimo verso) o heptasílabos.

Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar,
y otra vez con el ala a sus cristales
jugando llamarán.

Pero aquellas que el vuelo refrenaban
tu hermosura y mi dicha a contemplar,
aquellas que aprendieron nuestros nombres...
ésas... ¡no volverán!

Volverán las tupidas madreselvas
de tu jardín las tapias a escalar,
y otra vez a la tarde aún más hermosas
sus flores se abrirán.

Pero aquellas cuajadas de rocío
cuyas gotas mirábamos temblar
y caer como lágrimas del día...
ésas... ¡no volverán!

Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar;
tu corazón de su profundo sueño
tal vez despertará.

Pero mudo y absorto y de rodillas,
como se adora a Dios ante su altar,
como yo te he querido..., desengáñate,
nadie así te amará.

 

Estoy seguro que como medio de enseñanza a quién quiera aprender a ser poeta, tiene todo el valor del mundo, pone en dificultades que vencidas habilitan en cualquier otra estrofa.
He utilizado mal la expresión verso libre, quizá recordando un mal texto del bachillerato, me quería referir a la ausencia de estructura externa en la poesía, a utilizar la rima, la medida, el ritmo, sin sujetarse a ninguna estrofa establecida, y también a la plurimetría que mencionas.
Mi soneto se inicia experimento, en cuanto a rima; aprovechando vuestras enseñanzas, no hay que desperdiciarlas nunca, experimento ampliado a los acentos. Con esto me basta, de momento, mi impresión es que un soneto para quedar bien necesita un tema que quepa en el soneto... si alguna vez me surge... ya sé más que sabía para hacerlo. Y además, sé más de poesía. Gracias de nuevo.

 

Musador, gracias por la intervención. Precipitadamente te he contestado al contestar a Oncina, disculpa, lee, por favor mi explicación sobre mi error al llamar verso libre a la poesía de Bécquer. Saludos

 

Te felicito, eres tan inteligente como razonable. Te vislumbro como un gran sonetista y, para prueba, este formidable soneto que has logrado.

Un abrazo,

Gladiadora______________