De su silencio es señor, de sus palabras esclavo; lo sabe, y en consecuencia nunca confesó su amor por no sufrir menoscabo en su amada...
Una ráfaga de viento ha visitado el balcón de mi casa; yo escribía en un papel lo que siento por ti, dulce amada mía, dentro de mi corazón....
La obsesión por el tamaño Una escena en mi memoria se me ha quedado grabada. No creo que pierda nada en contaros una historia que,...
Gracias, Vianne, por leerme y comentar; celebro que el poemilla te gustase.
Fortuna Un hombre puede ser afortunado gozando de escasísima fortuna. Conozco a más de un rey que desayuna de té, café con leche... o un...
Invitado, ven y descarga gratuitamente el cuarto número de nuestra revista literaria digital "Eco y Latido"Cerrar notificación