Es pleno invierno. Estoy en una playa. La soledad, total. Renuncio a todo. Hay mucha luz y sé que, de algún modo, la tiniebla me hiere; su...
La húmeda caricia de los ojos del lagarto, alimentando nubes como relojes muertos, mientras bocas redondas de miedo y de silencio levantan muros...