Ángel de la guarda

Mensajero de Dios que velas por mis sueños,
Que me das calma en momentos tensos,
Tus alas abrigan mi corazón del frío, del odio,
Intento describir tu figura en un folio.


Ángel de la guarda que me reconfortas y me das calma,
Me alumbras a escribir cuando todo lo demás falla,
Aquel que me acompaña por la noche,
Que en la mañana pronuncia mi nombre.


Mi ángel de la guarda, mi dulce compañía,
Me acompañas en melancólicas poesías,
Si el mundo es mi enemigo te conviertes en mi abrigo,
Me haces ver que no todo está perdido.


En noches de amargura, me llenas de dulzura,
Eres ese resplandor que de noche me alumbra,
Si la realidad me aturde y la gente me confunde,
Pediré que tu luz me alumbre.


Cada verso que mi ser escribe,
Lo contemplas como si las letras fueran un desfile,
Das luz en la penumbra,
Donde guías a mi alma insegura.


Ángel de la guarda, mi dulce compañía,
Que velas mis más sinceras poesías,
Me das fuerza durante el día,
Y de noche me cobijas, mi alma desnuda abrigas.


Tu mano sincera te extiende como una amiga,
Con tu luz mis errores derribas,
Me alejas de todo lo que me lástima,
Ángel de la guarda, mi fiel compañía.

 

Buen poema Andrés. Saludos.