Árbol del Tule. (Imagen nº1 de octubre)

Logras enlazar una inspiración con la imagen, alcanzando con bellas metáforas todo lo que el árbol simbólicamente extiende hasta tu interior. Plácida y maravillosa lectura que disfruto. Un saludo y abrazo cordial.

 

Siempre es un placer sentir tu presencia en estos intentos de hacer poesía.
Un gran abrazo desde la cercanía.

 

Hola, Carmen, y muchas gracias por venir a estos versos afines a los árboles que nos rodean y a los cuales soy adicto.
Nos vemos entre líneas, versos y poemas.

 

Pues no sabes la alegría que me dio verte subir a este árbol que, aunque esté en México, podemos compartir entre paseos.
Se te echa de menos... y tú lo sabes.
Besos, charra, y un abrazote de este tronco wasapero, je je.

 

Desde los árboles en que trabajo vi este soberbio ejemplar, y como soy adicto a sus ramas y alturas no se me ocurrió otra cosa que dedicarle un poema.
Muchas gracias, Nancy, por compartir estos espacios que los aires proponen y en los cuales seguimos escribiendo lo que nos llega.
Un abrazote transoceánico.

 

Alonso, extraordinario poema donde haces brotar todo el agradecimiento, el profundo amor y la admiración que te produce este majestuoso árbol, fruto de Dios, nació desde una pequeña semilla y hoy viene a ser el gigante que cuida nuestros sueños.
Hermoso estimado poeta
Realmente reciba mis felicitaciones
MANUEL

 

Los árboles tienen algo de mágico, por su longeva existencia, son testigos silenciosos de nuestra historia y nuestras vidas. Desde luego, si pudieran hablar serían los mejores maestros posibles. Precioso soneto, Alonso, me encantó. Un gran abrazo amigo, y feliz semana.

 

Ahhh preciosos versos Alonso, ver de cerca al Ahuehuete es toda una experiencia, al rededor de su tronco la gente te cuenta historias, buscan figuras en los nudos de su corteza, Santa María de Tule es un lugar precioso, al igual que el resto de Oaxaca, un lugar que cuenta la historia de una de las culturas más grandes de mi país, un enorme placer leerte, besos.

 

Siempre maravillado por los árboles, y más por estos ejemplares que parece que vencieran al tiempo y a las adversidades, entre ellas los humanos.
Muchas gracias, amigo Manuel, y un fuerte abrazo desde esta naturaleza que me circunda.

 

Desde pequeño que les cogí cariño a estos gigantes que levantaban muchos más palmos del suelo que yo, je je… y ahora, casualidades de la vida, trabajo entre y con ellos.
Yo creo que empiezo a entenderme con ellos.
Un abrazo, Luis, con ramas y hojas… las que quedan del otoño.

 

Ay, que yo solo lo he visto en foto. Ya me gustaría charlar a su sombra y escuchar a la gente que protege con sus ramas y… y ver toda la comarca, ¡qué carajo!
Muchas gracias, Mariposa, por venir a este poema que fue hasta tu país para escribirse.
Un gran abrazo desde el Mediterráneo.

 

Magnífica conversación con el hermano árbol.
Los dos sabemos que las piedras hablan,
que los árboles narran, el agua canta...
Larralde te trae el viento y el roble
y yo, amigo entero,el abrazo de las 13 y 15

 

A las 14 y 8 te leí mientras comía un bocadillo del marisco de los pobres, también llamado atún en lata. Entre árboles y naranjas, con vino y gaseosa.
Nada sería del roble sin la semilla que le dio la vida y poco seríamos sin ellos que aguantaron los años que guardan en cada anillo.
Muchas gracias amiga entera por el poema musicado que relajó mi hora de asueto... y ahorita te cuento.
Besos.

 

"Nada sería del roble
sin la semilla que le dio la vida
y poco seríamos sin ellos
que aguantaron los años
que guardan en cada anillo..."

Voy a tener que empezar a darle al vino con gaseosa
mira que poemita-comentario te salió al segundo trago
Me lo llevo para acompañar la cena, huevos rellenos
con marisco de los pobres qué rico...