Bailarina de cuerda

Estas enferma bailarina de cuerda,
agonizas en tu lecho de escarlata.
Eres un amor sombrío,
una jovenzuela dulce y diminuta.
Deja que limpie tus lágrimas
de tu rosado rostro.
Tu cuello blanco a callado
cesa en barullo infantil,
pero las hadas juegan en el cobertizo,
esas vocecillas alborotadas
que agrietan a la nuez.
Desciendes lentamente a lo vespertino,
otros corderos pastaran tu llanuras.
mira aquellos nidos en los árboles
duermen placidamente
pero dentro existe vida.
Bailarina de cuerda, dulce bailarina
te sientas junto a la cama
y le sonríes a la noche.


Sebastian Dusalgi.

 

Sebastian, un buen poema, bien hilado, cargado de ternura, inocencia que se vende .......en fin tiene contenido para reflexionar. Me gusto detenerme. Felicitaciones, me gusto de corazón que si.

 

El talento enorme de la emocionante poesía divina.

 

Sentí la nostalgia que deja la niñez con sus bailarinas siempre dando vueltas sin parar...
Metí mis recuerdos en tus bellas letras y muchas gracias poeta por sacar de nuevo la niña que a veces se pone a dormir.
Un abrazo y felices fiestas