¿Cuándo retornará la paz?

¿Cuándo retornará aquella paz?
Pregunto engullida en la desidia,
la misma asfixiante rutina
que carcome a migajas la vida.

Una hiedra ahoga el silencio,
el espacio reduce a medio metro,
no ceden mis pasos ahí dentro.

El desespero reprime los gritos
que van a dar a lo lejos,
en mi cerebro.

¿Cómo carajos hallaré tal paz?
Veo eterno el tic tac de las horas,
me quiero volver perversa asesina
y desterrarlos de ésta existencia ruina.

Pero un sonido distante
que apenas distingo,
me ruega: -Paciencia.
Cual si fuese un niño,
calma mi propia guerra,
que crece dentro y se alimenta de afuera.

Con las fuerzas ya rastreras, mendigo paz.
Aquella que solo entre tres, solíamos conjurar.

​

 

Paz y tranquilidad, a todos nos hace falta nuestro espacio . Me gusta como has reflejado la angustia de la convivencia. Muchos besos.

 

Exactamente...esa falta de espacio que asfixia...que no te deja moverte a tus anchas, jejej por eso la imagen de atrapada en la telaraña. Ciertamente hay que hallar paz...así sea debajo de la almohada, pero intentar hallarla...Un beso.

 

Muy bien trasmitido ese sentimiento de ahogo.Hermoso poema !! Felicitaciones y abrazos

 

Hola Migue, agradeciendo tu visita. Es precisamente esa sensación la que bordea el poema. Un saludo muy cordial

 

Paz, paz , dulce paz! Qe se logre y a defenderla! gratísimo leerte , un abrazo!

 

Marea, la paz cuando llega no hay que soltarla jejej hay que aferrarse a ella con muchísima fuerza, porque a veces resulta que le gusta ser escurridiza y si se escabulle, ¡Ay tormento! Más grato es para mi tenerte por aquí, abrazo con mucho afecto.