Cuánto me dueles

Dolor. Cuánto me dueles...
La hoja marchita,
quizá doliente,
soñando en el pavimento.
La lluvia estancada,
quizá doliente,
añorando un regato.
Las botas gastadas,
quizá dolientes,
recordando caminos.

Amor. Cuánto me dueles...
La silla hospitalaria,
quizá doliente,
conservado tu calor.
La visita forzada,
quizá doliente,
premura la despedida.
La mano de la mano,
quizá dolientes,
aferrando el amor.

¡Dolor, cuánto me dueles!
cuando me dueles de amor.

 

Cuánto me dueles...
La silla hospitalaria,
quizá doliente,
conservado tu calor.
La visita forzada,
quizá doliente,
premura la despedida.
La mano de la mano,
quizá dolientes,
aferrando el amor.

Me han encantado tus versos y su ritmo y sentimiento. En especial estos... Un abrazo.

 

Demasiado dolor respiran sus letras, infinidad de veces las turbulencias flagelan el alma y nos llevan por esos tormentos, excelente manera de trasmitir ese sentimiento, grato leerle, saludos!

 

Un dolor dolorosamente dolido...??? !!!Me alegra mucho encontrarte por aquí Mikelo. Saludos cordiales par ti.

 

el solor nunca se marcha. siempre está ahí buscando salir insidiosamente para marcarnos de alguna manera, grato leerte poeta

 

Querido Amigo, Mikel, Poeta:
Me gustan tus versos, la forma sencilla y pura con que logras transmitir la intensidad y la profundidad de tus sentimientos. No me gusta que te duela, no me gusta tu dolor porque está vivo. Y si, ya se perfectamente que el dolor nos templa y que cuando logramos salir de él, y traspasarlo, una nueva y, quizá mejor versión de nosotros se manifiesta, y sin embargo, no me gusta que te duela. Recibe mi saludo cálido y cordial, un fuerte abrazo, y mi mejor deseo.