Del Edén al Mar.

Desde que lo conseguí todo...
Ya, no puedo tener más hijos.
Pero me sentó bien el Edén, o Paraíso terrenal.
Y bailo como David Elsewhere,


también conocido como David Bernal.





David de cualquier otro sitio...
¡ Tantas Yolandas !
Tantas Mónicas y Verónicas...
Tantas santas.


Que, finalmente, coincidimos.


" Soy tú, ¿ Por qué no te das cuenta ?
¡ Deja ya de hacerme el Amor, y de mascar chicle sin azúcar !
De fresa, naranja, regaliz o menta.
Prueba la sal marina gorda. "


Y en ésas estoy. La disuelvo en agua fresca...


" Amigo, si todos somos Uno...
Y si ese Uno se parece a la electricidad de las tormentas,
también será impenetrable, como el sabor salado, al máximo,
de una cucharada sopera de sal gruesa. "


¿ Merece ser dosificado ? ¿ El Amor, atenuado ?


" El Amor procura ser tu amigo. "

 

Nommo,
compañero de ambos mundos, del poético y el que respiramos.
Honestamente, es inevitable no leerte porque tus letras me conectan a otros paisajes del alma o a donde no se va muy seguido...por eso, como los anaranjados conos en las carreteras, tus poemas llaman la atención...y esa libertad que se lee es la misma que siente y vive David Elsewhere...pretty sure my friend!..

Saludos desde Oregon,.

Fidel.

 

Fidel, me honras con tu comentario.
Yo sólo soy amigo del océano.
Me gusta el planeta Tierra, con sus continentes, y sus mares.
Por ello, hago apología del Mar.


Como si fuera el último rincón, o la entidad más alta de todas.


O sea, después de tenerlo todo...
Aún falta una última conquista.
Después del Paraíso, está la playa.
Y en la playa, hay que hacer experimentos científicos.


Entonces, Adán pasa a ser un David Elsewhere. De cualquier otro sitio. No se sabe...
Puede estar en Chile, o en Japón. Malaysia, Thai-Landia, Birmania...
Tel-Aviv, el Cairo, Túnez...