El ciego

El ciego

Toda esta sensación de haber perdido
el dorado secreto de la vida
es de alguna manera siempre dulce
y siempre demorado. Por la senda
que se bifurca plena de sentido,
y luego nace oscuramente nuevo
otro sonido. Fiel reflejo. Ritmo
en mi noche de trampantojo. Un ciego
deseo de orientarme a la deriva.

 

¿Por qué es ciego ese deseo?

 

Y por qué no?

 

Es solo una pregunta.
No te comentaré más.

 

Viéndonos realmente, uno siempre es ciego en su caminar por esta vida. Dejamos que el sentido nos guíe a la sorpresa de lo que vendrá.
No conocía la palabra "trampantojo", me agradó esa sutil diferencia que una palabra puede hacer, no embarullas al lector con grandilocuencia, eso es de destacar.
Muy bello.

 

Nos perdemos en ciegos deseos, sin duda.
Un gusto.
Saludos.

 

Me alegro. Gracias. Saludos.