El lobo y la luna

Que pretendes lobo aullando a la luna
con pasión fuerza y ternura,
al observarte creo que es locura.

Quizás te pueda escuchar,
Quizás te pueda observar,
Pero te aseguro que feliz ella se encuentra,
Junto a las estrellas siempre vivirá.

Ya no sigas deja de aullar
Que jamás aquí vendrá
Es inútil que trates de intentar
Mírala muy lejos de ti está.

“Escucha” me respondió:
Solamente quiero cantar
Y entonar bella canción
para que sepa aquí estoy

Cuando llega la oscuridad
Cuando ciego creo estar
Su belleza me alumbrara
Y su nobleza me guiara

Se que jamás con ella estaré
y abran noches que triste llorare
pero desde lejos me consolara,
y eso me basta para
no dejar de aullar..

 

Muy bello...

 

Me ha gustado mucho mucho. Es muy triste y de alguna forma bello el no poder alcanzar a ese alguien, o a ese algo que tanto te inspira y tener que resignarse a aullar y tratar de acercarte cuanto sea posible. Es muchas veces el unico consuelo, aunque sea tan solo parcial. Me parece muy acertado que lo hayas planteado como un diálogo, pues es la eterna discusión de si vale la pena o no, el conflicto que te plantean los demás y el que se crea dentro de uno mismo ante una situación tan contradictoria y aveces vana. Comprendo en parte ese sentimiento... y no se si el tuyo sea el mismo, en todo caso el poema me lo ha recordado. Te felicito por lo escrito, me ha llegado.

 

Dejo la huella de mi paso por tus bellas letras.

 

Muy bellos y nostálgicos tus versos. Un pacer tus letras.
Saludos