EL MIEDO III

​

Le da miedo la victoria
cuando ve cerca la meta,
y de nuevo la cometa
cae con su propia euforia.
De un hilo pende su gloria
mas no lo puede entender;
cuando más dice querer
más amarga es su caída,
y arriesga sin más su vida
cuando empieza a descender.

Hoy se queja sin razón
de que no aprecian su vuelo,
culpa suya es si en el cielo
no le prestan atención.
No sube con precaución
y presume de ser fuerte,
mas teme perder su suerte
al caer desde tan alto,
pues sabe que en el asfalto
puede que encuentre la muerte.


Miedo a la depresión.


​

 

Hola, poeta:
Te comento que no hay fuertes frente al miedo, todos somos débiles y a todos nos cuesta admitirlo. Pues todos en algún momento tememos por nuestra naturaleza innata, por nuestros prejuicios, incluso nuestras certezas muchas veces dan miedo. Pero el miedo no siempre tiene su lado negativo ya que nos ayuda en ciertos casos a dudar y luego pensar mejor.

Ya esta el dicho que dice que no es el mejor hombre el que no teme, sino el que sabe como controlar ese temor y no termina siendo un cobarde.

Yo le temo a tantas cosas, amigo, que sería difícil de imaginar, pero en cierto momento la vida se encarga de ponernos a todos cara a cara frente a todos nuestros temores. El hombre que no teme no existe, este siempre temerá, pero el hombre que a madurado por completo y hablo incluso en el último instante cuando enfrenta a la muerte sabe o sabrá como controlar ese miedo.


Con respecto a la depresión, el depresivo muchas veces vuelve ese miedo en pánico, el contexto influye mucho “es el factor principal” también la autoestima de la persona. Esto que digo, no lo digo de boca de ganso sino porque lo vi en mi madre. Su depresión fue tan grande que se volvió una esquizofrenia y bipolaridad.

No sé si tus bellas décimas, amigo, realmente son el espejo de lo que siente una persona así, pero algo de razón tienes con lo que yo vi que se produce con la autoestima del depresivo.

Te comento algo que no tiene mucho que ver con tu trabajo, pero ya que estamos en el tema da para hablarlo. Una vez un psiquiatra me dijo que todos tenemos el bichito de la depresión dentro, sólo es necesario un par de condiciones y contextos para que despierte.
Por más fuerte que seas y por más autoestima que tengas, siempre estas a un paso de caer en la depresión y una vez que llegas a ese bache ya no hay vuelta atrás.

Ahora con los depresivos es todo lo contrario a lo que dicen tus décimas: ellos para nada se siente fuertes, se siente débiles y sienten que necesitan el apoyo de todos los que los rodean para vivir, y lo peor de eso es que siente que no lo tienen aunque el resto se lo estén dando constantemente.

El depresivo vuelve a un estado retraído en el tiempo y llega a tener unos rasgos tan grandes de inseguridad que la persona que esta al lado de él se aterra de ello. Pero este sujeto muy rara vez se da cuenta.
En esto que digo, notaras una diferencia textual que difiere bastante de tu segunda décima.

El tema de arriesgar su vida, créeme que ellos no lo ven así, sino todo lo contrario. Los depresivos lo toman como un escape al infierno que viven. Y frente a esa idea, realmente son más valientes que cualquier otro.

Realmente el tema de los depresivos no se si se liga tanto al miedo, sino más bien a la fobia y al propio pánico.

Obviamente que todo esto que te comento, es una visión muy particular mía basada en conjeturas de vidas y largos años andando atrás de los depresivos.

Tu poema es muy bueno, pero siento que lo escribiste como si no te hubieses empapado mucho sobre el tema que quisiste tocar “la depresión y su miedo”.
Tal vez mi comentario se hizo más extenso de lo que hubiese querido, pero es que tocaste justo un tema del cual estoy sumamente interesado y más todavía porque la gente tiene muchas ideas erróneas sobre la enfermedad de la depresión.

Me gustó leerte. Ahora si me permites te quisiera marcarte algunos pequeños detalles que pude notar.

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Fíjate que en todo el poema acentúas algunos más y otros no: pero creería que no durante todo el poema lo haces como debería ser.

Ten en cuenta que el “más con tilde” es el de cantidad y el “mas sin tilde” es el que se puede sustituir por pero.



Le da miedo la victoria
cuando ve cerca la meta,
y de nuevo la cometa
cae con su propia euforia.
De un hilo pende su gloria(,)
más (mas : pero) no lo puede entender, ( ; )(Acá un punto y coma iría genial)
cuando mas (más: cantidad)dice querer
más amarga (es)su caída, (se puede omitir el nexo “es” pero no es muy aconsejable, aparte su empleo no afecta la métrica)
y arriesga sin más su vida
cuando empieza a descender.

Hoy se queja sin razón
de que no aprecian su vuelo,
culpa suya (es) si en el cielo (acá también se puede omitir el nexo “es” si usamos el empleo de la elipsis, pero no es aconsejable y acá tampoco afecta la métrica)
no le prestan atención.
No sube con precaución
y presume de ser fuerte,
mas teme perder su suerte
al caer desde tan alto,
pues sabe que en el asfalto
puede que encuentre la muerte(.) (te olvidaste el punto final, amigo)



Espero que estos detalles no te molesten, si es así te ofrezco mis disculpas, pero mi intención es que sepas lo que pienso y sobre todo ayudar.


Se me pueden pasar algunos otros detalles si hilamos aún más fino, pero a Jorge “musador” seguro no se le pasaran para marcártelos.


Un abrazo grande.

 

Mi querido amigo Danie, yo vivo con una persona depresiva , el cambio de un estado a otro es como el vuelo de una cometa , Yo agarro del hilo e intento que no se caiga , pero no siempre lo consigo, ella se siente fuerte si no siempre estaría en estado depresivo , son sus miedos o sus fobias como bien dices los que la hacen caer de nuevo en ese estado de inseguridad y de auto dependencia de enemigos como el alcohol , entonces toca de nuevo luchar contra el viento e intentar de nuevo que alce el vuelo y cuando eso ocurre , siempre sale la palabra "tengo miedo " , amor no sueltes nunca la cuerda.
Yo no se si consigo convencerte con mis décimas pero el depresivo se cae cual cometa y te aseguro que cuando vuelve a subir hay un miedo colectivo a que vuelva a caer , al menos yo así lo vivo.
En cuanto a mi gramática te pido perdón ,a Jorge siempre le doy trabajo extra pues soy muy escaso en recursos , por eso subo aquí mis poemas , por la ayuda que recibo en este caso también la tuya.
Un abrazo desde Catalunya

 

Un par de hermosas espinelas acerca de la fragilidad de las euforias de los depresivos, estimado Ramón, usando la bella metáfora de la cometa (¡cuántas cometas colgadas de un cable de luz dan testimonio de esta fragilidad!).
Así es, la euforia conlleva el miedo a perderla, y este miedo es muchas veces causa de la caída.
Te dejo un par de notas en la cita
abrazo
J.

 

Jorge no consigo ver tus notas, solo la fotografia, me gustaria saber que tengo que corregir amigo, un abrazo.

 

Prueba de hacer "click" con tu ratón dentro del recuadro donde ves la fotografía.

 

Perdona, lo debí hace mal al principio, ahora si que me sale tu nota, un abrazo y gracias Jorge.

 

Buena metáfora . Es cierto que tener cerca la victoria al depresivo le aterra porque tiende a pensar en negativo y su mente con los registros de tristeza y ansiedad lo limita para salir del agujero donde se encuentra. Los medicamentos, las terapias y la comprensión de la familia son una ayuda imprescindible para colocar al depresivo en la línea de salida para tomar la senda de una vida de paz interior y felicidad que le procure esas ganas de vivir que son necesarias para mantener una buena salud mental.
Abrazos Ramón, disfruté con tus décimas

 

Hola, amigo, perdón no debes pedir pues no hiciste nada malo a nadie. Acá en el portal todos estamos para ayudar y a su vez para ser ayudados. Todos compartimos un amor por el arte y por la poesía, pero ninguno de nosotros esta exento de no cometer errores, somos humanos y los podemos cometer, y solamente es nuestro deber marcar algunas pequeñeces cuando las notamos para que la obra del autor a nuestro parecer brille como se merece.


Con respecto a las diferentes opiniones textuales: cada quien vive su propia historia y la cuenta de a cuerdo a lo que vivió, y yo siempre respeto la opinión del autor, él siempre tiene la última palabra sobre su texto.

No quiero que mal interpretes mi comentario; tu trabajo hecho con décimas espinelas me gustó mucho, solamente te quise dar otro punto de vista sobre lo expuesto.

Mi experiencia y tu experiencia pueden ser distintas, y en eso no tiene que haber ningún problema, ya que no todas las depresiones son iguales.

Son muy buenas décimas, amigo, y eso ya te lo había dicho en el anterior comentario sin importar los distintos puntos de vista.

Un abrazo grande poeta.

 

Mucho han dado que comentar estas dos hermosas décimas sobre un tema tan complejo como es la depresión; ya también la he vivido bien de cerca (no en mi, por fortuna) y sé bien de sus devastadores efectos.

Permíteme que te felicite de veras por este trabajo, Ramón.

Un fuerte abrazo.

 

Es un bello paralelismo, unas bellas espinelas en una sola metáfora. Pero el problema que noto es que al final explicas la metáfora. Creo que ello debería haber sido captado por el lector. Quiero decir que noto faltas de enlaces en las palabras (palabras que enlazaran la enfermedad a la cometa) utilizadas que nos llevaran a ello.

De todas maneras es un trabajo que me ha gustado.

Se le saluda cordialmente.

 

gracias Evano , mi intención fue no dar pie a errores de apreciación ,quería dejar claro de que iba el poema , un fuerte abrazo dese Catalunya

 

Tus décimas, por ser vivenciales, tienen para mí mucho más valor y más belleza de la que tendrían si fuesen escritas desde la impostura. Echar mano de la versificación clásica, ajustarse a ciertos requerimientos formales y escribir algo coherente y natural son logros que no todo poeta sabe alcanzar, de modo que te felicito sinceramente por esta muestra de tu talento poético.
Sobre el tema, nada más que agregar, ninguna experiencia ni conocimiento de lo que presumir; solo diré que es delicado eso de ponerse en el pellejo de los demás, sobre todo porque este trastorno, que puede ser caracterizado universalmente, tiene un significado mucho más íntimo ─y eventualmente muy diferente─ para aquellos que realmente lo padecen. ¡Excelentes décimas, amigo Ramón!, lo mismo que la manera tan especial en que has decidido afrontar tan difícil propuesta.
Un abrazo.

 

Gracias por tus palabras Elhi, me llegaron muy adentro amigo, yo solo soy un buen hombre que quiere a su mujer y me consuelo escribiendo cuando ella está ausente, sigo llevando mi cometa de la mano lo mejor que puedo y así sera mientras dios quiera, un fuerte abrazo desde Catalunya.

 

Gracias mi apreciada amiga, un fuerte abrazo de este soñador que sigue aguantando de la cuerda,