El orden 10

Pues lo he estado pensando, y quizás sea ese orden que siempre he procurado en mis pequeñas cosas lo que me haga disfrutar de otros desórdenes puntuales y pasajeros. Al fin y al cabo, si no dañamos lo fundamental, que es el respeto mutuo, siempre habrá nexos de unión hasta en los polos opuestos.
Hacía tiempo que no te veía asomar por esas montañas nevadas... Y vuelve a ser todo un placer tu cercanía.
Besos, Lomi, desde estas huertas y mil gracias por la presencia.

 

¡Muy bueno este orden Vicent! los cuartetos me han sonado livianos a pesar de las normas. Los tercetos son algo mas dulces unidos sabrosamente a las tareas del hogar y que tanto tiempo nos roban, aunque ya sabes que es cuestión de organizarse.
Muchos Abrazos, espero que la casa haya vuelto al orden

 

Buenas tardes, Valentina. Llegó el orden a casa, aunque aún estoy barriendo y fregando suelos, je je... pero tengo tiempo esta semana, así que vamos organizando.
Un besote.

 

Bueno, el caos con patatas, bien cocinado y acompañado de unas mahous tampoco está mal del todo.. lo de las azafatas, enfermeras y cocineras, pues en fin, que te veo muy metido en el tema laboral , ...yo también me llamaré al orden y apoyaré tu moción sin entrar en innecesarios detalles de uniformes, delantales ni vuelos, jajja. Muy simpático y chulo este poema, Alonso. Me gustó sin ordenanzas.. Un abrazo amigo!.

 

Tu soneto fluye naturalmente, suena musical y casi natural, un placer leerte. Ya quisiera yo tener eso orden. Gran trabajo.

 

Venga esas mahous. Se acabó la baja laboral y ahora soy yo el que se vuelve a poner el uniforme, deja el apetecible caos del tiempo libre y se reincorpora a sus faenas... con lo bien que me quedaba el delantal de ir por casa, je je je.
Un abrazote, Luis, y el humor que nunca nos falte.

 

Muchas gracias, Sabez, y encantado de que te gustaran estos versos que no se resignan a ser ordenados.
Un saludo compañero.

 

Muchas gracias, Nancy, desde este desorden que solo se disfruta los días en que no hay que ir a trabajar, je je, como mañana domingo.
Un abrazote, amiga y enorme poetisa, con caramelos y el suficiente desorden para sentirnos vivos.

 

Hola Anbel. El empuje que no nos falte, al menos para hacer llevadero tanto el orden como el desorden.
Muchas gracias por venir y un abrazo de estos digitales.

 

Je, je; al fin y al cabo hasta el desorden busca su equilibrio. Reconozco que me gusta el orden, pero no si es impuesto.
Muchas gracias, Mariposa, y un abrazote en todo orden.