El pan

El pan

Tengo la sensación
de llegar siempre tarde
a esa reunión, donde
se discute el destino
de nuestras vidas, como
una broma a destiempo;
absurda flor de otoño;
cheque sin fondos;
mechero sin su piedra;
la pieza sin su puzle;
prenda que no conjunta;
pregunta sordomuda;
ese último yogur
que ya está caducado;
un invitado en boda
equivocada. Estoy
siempre donde no debo
y para cuando llego,
la fiesta ha terminado.
Soy un abrazo
en el vacío. Muevo
la reina en un tablero
sin piezas. Cuento
ovejas cuando estoy
soñando. Sobrevivo
en Babia. Por las nubes
me enredo y no consigo
bajar a tierra. El rayo
que no cesa, me quiere
de cara a la pared.
Repito la lección
que olvido sin querer,
y quiero recordar
lo que ya sé. No importa
si voy o vuelvo. Acudo
a un sitio clausurado
por obras. Suelo irme
de donde debería
quedarme. Mi cantar
es, quizás, la manera
de poder resolver
lo que no soy capaz
de comprender. Me queda
la duda de dudar
que no me aclaro. Vuelo
sin motor, sin ayuda,
con el corazón ciego
y las manos tan llenas
de mis poemas. Tiempo
soplando al tiempo. Parto
el pan del llanto
con quien desee
leerme.

 

Grata lectura, saludos

 

Gracias. Saludos.

 

Gracias por comentar. Saludos.

 

Se me acaba a veces el pan, que nutrido poema.
Un placer.

 

Pues sin pan, no hay plan, o eso dicen. Pero no por más pan y circo saldremos de esta. En fin, celebro que te gustara.

 

Usted es genialmente diferente, ¿Será por eso?
Un gusto leerle. Saludos.