El segundo cerebro

El segundo cerebro
donde sus vagones corren carreras
en medio de tempestades y diluvios
huracanes y efecto invernadero.
Al llegar a la meta sólo cargan
el olor singular que los bautiza.
¿Son estos la razón de su magín?
¿Ideas del cacumen digestivo?
¿O sólo son un eco del discurso
de un director de orquesta que hace fuerza;
para sacárselos de encima?
Ya no me siento tan seguro
he terminado de escuchar
la VOX que nos propone distopías
soretes de un cerebro que digiere
el odio, la violencia y el desprecio
con que los medios salpimentan
el yantar que consumen sus gourmets.
Tampoco estoy muy convencido
que la diarrea incontinente
que se derrama por sus fauces
Sea la digestión de Belcebú
Al "señor de la moscas"
El Ser Humano lo supera..

 

Un poema un tanto cuanto escatológico, pero de eso hablas. Un abrazo.