Fortunata y Jacinta.

La gente aprende,
con el paso de los años.
Tú pasa el Pronto, y yo, el paño.
Limpiemos la mesa de caoba.


Que quede limpia, como los chorros del oro.





Y sea digna del cantautor Juan Trova.
Discípulo de otros muchos,
que le precedieron.
Supongo que Joan Manuel Serrat,


y Eros Ramazzotti.





También invitaremos a Peloti,
que es bajito y bonachón, todo, fibroso.
No encuentra parangón,
aunque sea anónimo, en el ancho mundo.


Vamos a contratar a Jesús Quintero,





para sacarlo de la ruina.
Es poeta teatral, y ratón colorao,
listo y astuto. Antonio Gala, el cordobés,
que antaño, escribía libros,


también podrá presentarse; aunque lo dudo.





Dada su ancianidad o vejez,
y a la vejez, ¿ Viruelas ?
Insuperable, no obstante, por su gran memoria,
se me antoja don Camilo José Cela.


En resumen: Mobiliario, a pedir de boca.





Pero actuemos, ¡ Raudas,
como el mesmo viento ! Ya que no son gigantes,
sino molinos.
Escapemos del Quijote de la Mancha.


Reunámonos, en una oficina.

 

No podrás escapar, Nommo, del Quijote de la Mancha.

 

Sí puedo hacerlo, pero para ello he de entender conceptos muy amplios.
Ya que la Bondad consiste en la comprensión de lo abstracto.
Entonces, de lo abstracto, extraigo suficiente información, como para mantenerme ocupado, durante toda una semana.
Y luego, un mes entero. Por ende, el año.
Y así, año tras año...





Lustro a lustro y decenio a decenio.
Entonces, ¿ Cuán largo es el Quijote ? ¿ Cuánto dura esa aventura ? ¿ Hasta la sepultura ?
O podremos averiguar el modo de recrear la historia.
Apuntalando algunas vigas y columnas, de todo el edificio; que sigue siendo un castillo de arena, no obstante.
Un castillo de arena, en el cuál viven muchas ranas escultoras.
Como monjas de clausura. O monjes cartujos silenciosos.





Entonces, el truco está en considerar al Otro, sea quien sea, como miembro de una estirpe, ya sea procedente de los reinos animal, vegetal o mineral. Así, no habrá malos entendidos. Y si es un edificio cilíndrico, adornado con aspas que giran sobre su propio eje, siguiendo el empuje del viento, habremos de tomar las medidas correspondientes. ¿ Ventilador ? ¿ Trituradora ? ¿ Batidora, hélice, o qué ocurre aquí ? ¿ Qué artefacto es ? ¿ Dónde está la licencia ? ¡ Los papeles ! ¿ Quién es el responsable ?

 

El tiempo es ambiguo, los finales son de trigo. Saludos

 

Los finales son de trigo, y también, de olivares.
Los finales son testigos del aceite de oliva.
De la breva y el higo. Del racimo de uvas.
El Tiempo, como los cangrejos rojos, en peregrinación por Cuba.