¡Gracias!

Giró hasta no tener más giros que dar,
pero, ciertamente, no iba a llegar a ningún lado,
solo giraba lentamente rebotando en el suelo húmedo,
de a ratos, cuando él lo permitía.
Al principio era un punto amarillo en mi espejo retrovisor,
y a pesar de que era él el que se acercaba,
jamás fue tan grande como para poder guarecerme bajo su sombra.
Siempre a ras del piso y rodando como una bola de nieve...
Pasó por mi lado indiferente y cruzó la calle
sin mirar si venía alguien de algún lado, solo cruzó la avenida.
Lo seguí con la mirada, creo que hasta sonreí,
imaginé que alguien lo querría o lo hubiera querido,
y ahora notaría su ausencia, mordí mi labio inferior
y me puse en marcha, lo atraparía para
devolverlo y entregarlo en mano, me fue difícil hallarlo igual,
estaba distinto, el trajín lo había maltratado,
pero al fin lo alcancé y lo tomé fuertemente,
de esta forma no podría volver a echar a rodar.
Volví sobre mis pasos y tras una larga caminata,
hallé a una niña con sus ojos opacos por una espera absurda
y vidriosos por las lágrimas contenidas.
_¿Es tuyo?-Pregunté.
_¡Sí señor! ¡Gracias por traerme de nuevo mi globo amarillo!

 

Por un momento y me dejas llorando te agradesco tu alago y tu gran abrazo y como dices lo segui con la mirada y creo que sonrei para ver quien se asercaba y ahora notare su ausencia pues pide mucho sabiendo aun que un beso a mi no a dado, tal vez llego distinto y dice que he callado cuando el callado es el.


Miles de gracias por haberme aqui invitado es triste y reflexivo y en mi silencio te lo aplaudo.

 

Sergio, linda historìa, seguro muchas veces somos como aquella niña, que perdiò su globo...
tal vez, alguien en algùn momento, nos devuelva la sonrisa.

Abrazos

 

Que dulce prosa amigo!!!
esta historia me lleva a la conclusión que cuando algo es nuestro, por muchos giros que dé , por muchos camisnos que recorra y por muy desgastado que esté , siempre volverá a nosotros.
Un gusto leerte

 

hola mi amigo chez me parece de lo mas tierno tu poema,me sacaste una sonrisa que salio de alma,un besito para ti de Liz Retana.

 

Una tierna historia hecha poesía. Me gustó.:::hug:::

 

Gracias amigo por pasar y dejarme parte de lo que te ha hecho sentir
Un abrazo siempre