Huellas en la arena

y un poema relativamente cálido, lleno de apego y mucha naturalidad, me gusta el ritmo y la secuencia de cada imagen, grato leerle

 

Gracias Marian por tu amable opinión. Hacía bastante que no entraba en la web por temas de tiempo y me ha sorprendido tu atención a los modestos versos de este aficionado. Gracias.

 

Muy bello poema de amor, original en su idea en el marco de una sensible escritura, me ha gustado mucho amigo José. Abrazote vuela. Paco.

 

Bioquímicamente sabemos mas del amor que de cualquier otro proceso químico cerebral, sencillamente porque es más explosivo. Los estudios del cerebro por fMRN ya han demostrado que las emociones humanas se originan en las neuronas que se encuentran en el denominado Área Tegmental Ventral (ATV), se conecta con glutamato con el sistema límbico, un conjunto de estructuras que incluyen el hipocampo y la amígdala, la ínsula y el núcleo estriado, que son las responsables tanto del deseo sexual como del amor, la conducta, la atención, el estado de ánimo, la memoria, el placer y la adicción . Y con dopamina contra el Núcleo Accumbens, la Amigda hace otro tanto, si has llegado hasta aquí, ya has caído, estas enamorado o dopado. Está demostrado que el amor está en la misma zona cerebral de la adicción a las drogas, la recompensa, la persistencia, las emociones, el movimiento fino o el aprendizaje. Y luego llega el GABA (ácido gamma-aminobutírico) lo retroalimenta inhibiéndolo todo.

Esto es el mínimo resumen electro-neuronal, hay mas de 62 transmisores, bioquímicamente hablando. En la idealización emocional no me meto, se lo dejo a los poetas.
A mí me dio después de quince años viviendo con una persona (siempre llego tarde), me duro 4 meses y tuve que dejarlo, no podía soportar no sentirme correspondido (Distinto nivel de explosivo), llevamos treinta y un años retroalimentando. Quien lo probó lo sabe.

 

Gracias Paco. Un abrazo y es agradable comprobar que sigues en forma y pendiente de todos.

 

Gracias por acercarte a esta isla con botellas mensajeras.
No he entendido bien tu historia pero amor y desamor son direcciones (opuestas claro), de la misma autovía, la que más ansiamos recorrer en nuestrar vidas.
El sol brilla mucho, pero como toda estrella, con el tiempo pierde fulgor, calienta con distinto color e intensidad y finalmente ... se apaga (si es que antes no nos apagamos nosotros...). A veces tanto brillo nos deslumbra y lo sencillo parece complicado.
Gracias por hacer que mis doce musculos de sonreir se hayan, electro-neuronalmente y seguro que motivados bioquímicamente, estimulado.