La fama me persigue.

He resuelto algunas dudas,
al respecto de la imagen que proyecto,
diferente al Buddha risueño,
o Maitreya, nepalí o tibetano.


Parezco un duende que toca el piano.


Ante mí mismo, soy gusano
polivalente; pluriempleado.
Tan sabroso como prudente.
Tan esquivo como invisible.





Al filo de lo imposible,


para que no me hinquen el diente,
los pájaros.
¡ Oh, pájaros del tío-vivo !
Pájaros de la montaña rusa.


Pájaros del parque de atracciones,


¡ No me cocinen, adentro del horno !
Ni me frían, en una sartén,
embadurnada con aceite de oliva.
¡ No me utilicen como saco de boxeo !


Chasqueo mis dedos, y ya, me sitúo


dentro del pentagrama musical,
en el Solfeo.
¡ Uy, por los pelos ! Casi me calcan.
Me llegan a fotocopiar, y me hacen famoso...

 

Nunca podrían hacerte copia ni calcar
Nunca jamás
Nommo solo hay uno
Y aquí,
Te encontré.
Dentro de un gran estercolero.
Tuve que escarbar mucho para poderte ver.
Los amigos están
se quedan
no se escapan entre los dedos de los pies
Los verdaderos siempre se pegan a tu piel
aunque yo me empeñe y grite lárgate
siempre harán el revés de las cosas
Me gusta no usar puntos ni comas
¡Qué se jodan!

Gracias por quedarte conmigo
Por ser amigo y mostrarme el camino
Ser luciérnaga de las letras.
Ser Momo es complicado.
Muy difícil querido Nommo.

Silencio.
Te beso.

 

Realmente, me emociona verlo compañero... todo acicalado con su traje de funcionario público (ahora sé por qué se las sabe todas)
y esa carita de yo no fui... que no convence a nadie... mi querido Nommo. Y, más allá de su egolatría también se puede percibir,
su dedicación a su imagen personal, por cierto ya es famoso... porque siempre machaca cuando uno menos lo espera. Nommo es
Nommo... hasta el fin de sus días. Un placer divagar como siempre compañero.

 

No sé qué comentario es el mejor.
Me dejan ustedes, en la inmensa duda.
Para Momo, o sea, Aldonza Lorenzo, el piano.
Y para Iván, el frigorífico Zanussi, y el horno-micro-ondas.
Agradezco mucho su esfuerzo cotidiano, por alcanzar las cumbres borrascosas, y allí, plantar una semilla, que es la bandera de nuestra nación. La bandera de Antonio Banderas, que fue el Zorro. Porque así, tendremos éxito en la vida:


X + Y + Z;


o sea, trabajo, placer, y mantener la boca cerrada. Según esbozó Albert Einstein.
Es la nación del silencio.
Como el planeta en el que nació Súper-López: Chitón.
Ya que el dibujante de esos cómic, era sordo de nacimiento.


Aldonza ha acertado en casi todo...
E Iván, ¡ Me sorprende ! Parece un ajedrecista de primer nivel.
Ha calculado todos mis movimientos...