La niña de la taberna

En la taberna una niña
discute del vino aguado,
el tabernero la mira
por su vestido ajustado.

Los hombres beben su vino,
¡Ese si que estará aguado!
Por las mieles de sus bocas
por su vestido ajustado.

De raso y azul turquesa
a sus formas bien pegado,
los hombres hechos de agua
por su vestido ajustado.

El agua que tiene el vino
corre por todos los lados
mientras esté en la taberna
con su vestido ajustado.

 

jajaja... ps... que te dire!!

jajaja.. esto me recuerda a mis amigas!​

 

Pues si, querida amiga, por allí corría la baba y luego decían que era el vino.
Esto está inspirado en un cuadro genial de un amigo.
Muchas gracias por tu compañía y comentario.
Con mi saludo muy cordial.

 

Jjajaja.. como dicen por ahí... -El primo de un amigo, jajaja
seguramente ese amigo suyo, había notado a mi amiga
y sus típicos vestidos entallados en tales y pronunciadas curvas...

abrazos mi buen amigo... sigamos bebiendo vino... (en la caverna)​

 

Se saborea y mucho, el ambiente bien logrado, de esa taberna en la que apetece estar.
Sinceramente: muy bueno.

Un abrazo.

 

Muchas gracias, amigo Alfonso, te agradezco tu paso por mis letras con este comentario amable.
Esa taberna es posible que te suene.
Un abrazo muy fuerte.

 

Pero con una dama como la que describes, ¿quién va a poder disfrutar de un trago de vino?

Ya con verla a ella y a hacer hambre para llegar a casa con apetito.

Grato siempre leerte, saludos

 

¿Has visto, amigo Alfredo, lo que puede hacer una mujer hermosa en una taberna? Por lo menos aguar el vino que se tome.
Muchas gracias por la compañía tan valiosa en mis letras.
Un abrazo muy fuerte.
salva.

 

Pues sera lo único aguado que deje esa mujer!!

 

Ya me los imagino. Viendo las curvas hasta dormidos. Jajajja. Muy bueno.

 

Agradezco compañera ycnan este comentario y la compañía a mis letras.
Con mi saludo muy cordial.

 

Hermoso poema dedicado a la niña del vestido ajustado que me ha gustado leerte. Un abrazo amigo.

 

Muchas gracias, amiga Paloma por rescatar este poema. Celebro que haya sido de tu agrado.
Con mi abrazo.
Salva.

 

Me encantarìa ver a esa niña del vestido ajustado...

 

Pues existe, y la taberna, aunque sea en pintura estimado compañero. Y qué vestido...
Con mi saludo.
Salvador.

 

Casualmente me he acercado por el foro de cómicos y me es grato encontrarte aquí, con tu amable poema que invita a sonreír.
Un lujo, sin duda, para este foro.
Un abrazo.

 

Mil gracias, amiga. Tu compañía es un lujo siempre.
Con un gran abrazo.
Salva.

 

Lo que son joyas son tus amables comentarios con los que me siento acompañado, querida Isabel.
Un muy fuerte y fraterno abrazo.
Salva.