La vergüenza de paseo.

Daba la vergüenza paseos de plaza
Desde las terrazas mirando pasar
Mueven las cucharas cafés muy calientes
Para durar la tarde para mojar los dientes
Tramando la suerte de lo que desea
La rueca sin eje que mueve la historia
Tiene digital campana de suerte
Hoy la misma muerte y miedo a vivir
Brilla una pantalla hay alguien grabando
Suelo resbalando sangre de puñal
Se lleva cartera y móvil barato
La muerte en rebajas y dos mil comprando…

 

Sangre de puñal, y herida en el costado.
¡ Al ladrón ! Me zahiere y ha pecado.
¡ Contra mí ! Pues soy muy importante.
¿ Cómo no ? Si mi jamelgo se llama Rocinante...


La rueca sin eje que mueve la historia,
hace que aflore, en mi memoria,
la escena marítima y costera,
típica, de Otoño, Verano y Primavera:


Mochila al hombro, el buzo se zambulle,
con dos bombonas de oxígeno a la espalda.
Mochila al hombro, se deleita en el fondo marino,
almorzando en un picnic campero y de secano.


¿ Cómo lo hace ? ¿ Lo finge ?
¿ Por qué la esfinge vigila la pirámide ?


Daba la vergüenza, paseos en la plaza,
y colorín, colorado, desnuda forcejea y se embaraza.
¿ Por qué tuvo retoños, nueve meses más tarde ?
¿ Por qué y con quién y cómo, dónde y cuándo ?


Quiero ver esa escena por Televisión. Aquí está el mando...

 

Un placer leer.
Ya me había llamado la atención algunos de sus poemas , aquí estoy de nuevo.. saludos.