Las cartas. Glosando a Miguel Hernández. (imagen 1/febrero)

Alonso Vicent · 27 de Febrero de 2017

kalkbadan dijo: ↑

Fantástico poema, compañero. Qué belleza, qué ternura y qué sentido... Admirables estos versos, querido Alonso.
¡Bravo!
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La verdad es que después de cuarenta años leyéndolo, el temor era plagiar demasiado sus formas y contenido; esas que hace tanto me acompañan.
Muchas gracias, amigo Andreas, y siempre con la alegría de verte.
Un abrazote de lunes festivo, doble alegría.

Luis Á. Ruiz Peradejordi · 27 de Febrero de 2017

Una glosa sentida y hermosa. Paseo por el verso pleno de sencillez y sentimiento. Un saludo. LUIS.

Luis Prieto · 27 de Febrero de 2017

Alonso Vicent dijo: ↑

El palomar de las cartas
abre su imposible vuelo
desde las trémulas mesas
donde se apoya el recuerdo,
la gravedad de la ausencia,
el corazón, el silencio.
Miguel Hernández

El palomar de las cartas
hoy me acerca hasta estos pliegos
y al espacio donde vuelan
las plumas entre los dedos
y en el aire centellean
antes de llegar al suelo
y al domicilio preciso
del hogar de nuestros sueños.
Un trayecto que entre letras
abre su imposible vuelo
para llevar un presente,
carta con la firma y sello
del que en el centro se abre
y la cierra con un beso.
Besos hay que se liberan,
besos que llegan de lejos,
bocas que exigen su boca,
sobres, papeles, tinteros
y un alma que las escribe,
un alma que quiere serlo
desde las trémulas mesas
al palpitar de otro pecho.
Cartas nuevas, cartas viejas
donde se apoya el recuerdo
y se posan las miradas
que nos miraron sin vernos.
Dormitan en un cajón
o se esconden en un hueco
donde se mide el latido,
donde descansan los huesos,
la gravedad de la ausencia
y un lejano pensamiento.
Pasión que en amor mudó
todo su estremecimiento
y que guarda de lo humano
la inconsciencia de lo eterno.
Cartas viejas, cartas nuevas,
el corazón, el silencio.
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Un soberbio romance al que suelo puedo quedarme maravillado. Nuestro querido Miguel Hernández estará más que orgulloso por este merecidísimo homenaje.
Me descubro amigo mío, muchas gracias por regalarnos esta preciosidad.
Un fuerte abrazo admirado Alonso.

roman roses · 26 de Marzo de 2017

Alonso Vicent dijo: ↑

El palomar de las cartas
abre su imposible vuelo
desde las trémulas mesas
donde se apoya el recuerdo,
la gravedad de la ausencia,
el corazón, el silencio.
Miguel Hernández

El palomar de las cartas
hoy me acerca hasta estos pliegos
y al espacio donde vuelan
las plumas entre los dedos
y en el aire centellean
antes de llegar al suelo
y al domicilio preciso
del hogar de nuestros sueños.
Un trayecto que entre letras
abre su imposible vuelo
para llevar un presente,
carta con la firma y sello
del que en el centro se abre
y la cierra con un beso.
Besos hay que se liberan,
besos que llegan de lejos,
bocas que exigen su boca,
sobres, papeles, tinteros
y un alma que las escribe,
un alma que quiere serlo
desde las trémulas mesas
al palpitar de otro pecho.
Cartas nuevas, cartas viejas
donde se apoya el recuerdo
y se posan las miradas
que nos miraron sin vernos.
Dormitan en un cajón
o se esconden en un hueco
donde se mide el latido,
donde descansan los huesos,
la gravedad de la ausencia
y un lejano pensamiento.
Pasión que en amor mudó
todo su estremecimiento
y que guarda de lo humano
la inconsciencia de lo eterno.
Cartas viejas, cartas nuevas,
el corazón, el silencio.
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Maestro Alonso impresionante la manera de su trabajo, y otra cosa es el poema que es hermoso, Miguel Hernández, otro grande junto con Don Manuel Machado.

Unido perfecto el espíritu de los versos que uniste a los del Maestro Miguel Hernandez.
resuena un bello letargo de confort, leer el poema.

Aun mas que buscar su intepretacion. Difícil al no iniciado y lector de poesía. Me párese excelente.

Un placer siempre.
Saludos con afecto amigo Alonso.

lomafresquita · 6 de Abril de 2017

Alonso Vicent dijo: ↑

El palomar de las cartas
abre su imposible vuelo
desde las trémulas mesas
donde se apoya el recuerdo,
la gravedad de la ausencia,
el corazón, el silencio.
Miguel Hernández

El palomar de las cartas
hoy me acerca hasta estos pliegos
y al espacio donde vuelan
las plumas entre los dedos
y en el aire centellean
antes de llegar al suelo
y al domicilio preciso
del hogar de nuestros sueños.
Un trayecto que entre letras
abre su imposible vuelo
para llevar un presente,
carta con la firma y sello
del que en el centro se abre
y la cierra con un beso.
Besos hay que se liberan,
besos que llegan de lejos,
bocas que exigen su boca,
sobres, papeles, tinteros
y un alma que las escribe,
un alma que quiere serlo
desde las trémulas mesas
al palpitar de otro pecho.
Cartas nuevas, cartas viejas
donde se apoya el recuerdo
y se posan las miradas
que nos miraron sin vernos.
Dormitan en un cajón
o se esconden en un hueco
donde se mide el latido,
donde descansan los huesos,
la gravedad de la ausencia
y un lejano pensamiento.
Pasión que en amor mudó
todo su estremecimiento
y que guarda de lo humano
la inconsciencia de lo eterno.
Cartas viejas, cartas nuevas,
el corazón, el silencio.
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Ayyy Alonso, qué maravillosa glosa a Miguel Hernández, él se prolonga en tu pluma y vuela hasta nuestros corazones como suave y leve caricia eterna... Me dejas suspirando de belleza, y es que te admiro a ti y a tus inigualables letras. Encantada de leerte siempre de los siempres.....muááááckssss....

selenschek manfred · 8 de Abril de 2017

Alonso Vicent dijo: ↑

El palomar de las cartas
abre su imposible vuelo
desde las trémulas mesas
donde se apoya el recuerdo,
la gravedad de la ausencia,
el corazón, el silencio.
Miguel Hernández

El palomar de las cartas
hoy me acerca hasta estos pliegos
y al espacio donde vuelan
las plumas entre los dedos
y en el aire centellean
antes de llegar al suelo
y al domicilio preciso
del hogar de nuestros sueños.
Un trayecto que entre letras
abre su imposible vuelo
para llevar un presente,
carta con la firma y sello
del que en el centro se abre
y la cierra con un beso.
Besos hay que se liberan,
besos que llegan de lejos,
bocas que exigen su boca,
sobres, papeles, tinteros
y un alma que las escribe,
un alma que quiere serlo
desde las trémulas mesas
al palpitar de otro pecho.
Cartas nuevas, cartas viejas
donde se apoya el recuerdo
y se posan las miradas
que nos miraron sin vernos.
Dormitan en un cajón
o se esconden en un hueco
donde se mide el latido,
donde descansan los huesos,
la gravedad de la ausencia
y un lejano pensamiento.
Pasión que en amor mudó
todo su estremecimiento
y que guarda de lo humano
la inconsciencia de lo eterno.
Cartas viejas, cartas nuevas,
el corazón, el silencio.
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Magnífica glosa querido amigo, a la altura del mismo Hernández, felicitaciones Alonso, te dejo mi admiración y saludos sinceros.

Alonso Vicent · 9 de Abril de 2017

Luis Á. Ruiz Peradejordi dijo: ↑

Una glosa sentida y hermosa. Paseo por el verso pleno de sencillez y sentimiento. Un saludo. LUIS.
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Muy agradecido, Luis. Con Miguel crecimos.
Un saludo compañero.

Alonso Vicent · 9 de Abril de 2017

luis prieto dijo: ↑

Un soberbio romance al que suelo puedo quedarme maravillado. Nuestro querido Miguel Hernández estará más que orgulloso por este merecidísimo homenaje.
Me descubro amigo mío, muchas gracias por regalarnos esta preciosidad.
Un fuerte abrazo admirado Alonso.
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Siempre fue un referente Miguel Hernández desde la preadolescencia... y por aquí anduvimos con este intento de aproximarse un poco más a sus letras.
Muchas gracias, amigo Luis, y un gran abrazo hasta el centro de la Meseta.

Alonso Vicent · 9 de Abril de 2017

roman roses dijo: ↑

Maestro Alonso impresionante la manera de su trabajo, y otra cosa es el poema que es hermoso, Miguel Hernández, otro grande junto con Don Manuel Machado.

Unido perfecto el espíritu de los versos que uniste a los del Maestro Miguel Hernandez.
resuena un bello letargo de confort, leer el poema.

Aun mas que buscar su intepretacion. Difícil al no iniciado y lector de poesía. Me párese excelente.

Un placer siempre.
Saludos con afecto amigo Alonso.
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Miguel Hernández y Antonio Machado, dos referentes en la poesía que me tocó de cerca.
Muchas gracias, amigo Roman, por tu comentario y un abrazo con afecto.

Alonso Vicent · 9 de Abril de 2017

lomafresquita dijo: ↑

Ayyy Alonso, qué maravillosa glosa a Miguel Hernández, él se prolonga en tu pluma y vuela hasta nuestros corazones como suave y leve caricia eterna... Me dejas suspirando de belleza, y es que te admiro a ti y a tus inigualables letras. Encantada de leerte siempre de los siempres.....muááááckssss....
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Y yo siempre agradeciendo tu presencia reconfortante y las palabras que le dedicas a este jornalero aficionado a esto de escribir que tanto le roconforta.
Besos, amiga Lomi, con gran afecto.

Alonso Vicent · 9 de Abril de 2017

selenschek manfred dijo: ↑

Magnífica glosa querido amigo, a la altura del mismo Hernández, felicitaciones Alonso, te dejo mi admiración y saludos sinceros.
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Hola amigo Selenschek y muchas gracias por estar entre estas líneas homenaje a todo un referente como es Miguel Hernández.
Un fuerte abrazo hermano.

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