Llegó el amor

LLEGÓ EL AMOR
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El amor en cuerpo y alma
me ha entregado mi pintora
sin dudas y sin demora
otorgándome la calma.
Ella se lleva la palma
pues son sus ojos mi musa.
Mi vida en ella reclusa
no precisa otro paisaje.
Acabé mi cabotaje
en su pacífica exclusa.

Mi sonrisa, mi consuelo,
mi sostén y mi alegría,
todo en uno, vida mía,
lo que suspirando anhelo.
Eres mi infierno y mi cielo
Eres mi día y mi noche,
eres el perfecto broche
de mi vida aventurera.
Hoy en tus manos, entera,
te la dejo sin reproche.

De mi corazón amado
brotan perfumadas flores
que impregnan nuestros amores
de paraíso encantado.
Es el tuyo enamorado
el que responde gozoso
a mi llamado amoroso.
No se puede pedir más;
juntos por siempre jamás
hasta el mismísimo foso.

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Bien los sabes, Isabel, pues ya son muchos los poemas que le he dedicado, me alegra que estas espinelas también te hayan gustado y me dejes tan grato comentario al respecto.

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Celebro, amigo Joaquín, que te haya complacido tanto mi tema y me hayas dejado grata huella de tu paso.

 

Gracias, amigo Ricardo, celebro te hayan complacido estas espinelas y en especial los versos que indicas.

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Celebro, amigo José Luis, que te hayan complacido estas espinelas dedicadas a mi esposa.

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En efecto, amigo Ice, al enamorado se le nota enseguida su condición y si escribe sobre su amor se nota bien cuando es sincero y perdurable.
Gracias por tus buenos deseos, igualmente te deseo una buena e inspirada semana.

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Un delicioso Poema de amor que guarda tanto tiempo de vida engarzada. Un placer leerte estimado Maestro. Un abrazo

 

Celebro que haya sido de tu agrado, amigo Alde.

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En efecto, amiga María, toda una vida contenida en estas espinelas. Celebro que te hayan complacido.

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Gracias, amigo ángelcesar, no se precisan muchas florituras para mostrar líricamente los sentimientos, Celebro que te haya complacido la presentación y el desarrollo del tema en estas espinelas.

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Gracias, amigo José, celebro que este poema haya sido de tu agrado.

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Gracias, amiga Luciana, celebro que hayan sido de tu agrado.

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Celebro, amigo Alfredo que hayan sido de tu agrado estas espinelas que dedico a mi esposa como bien has adivinado.

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