Menudencia

Triste silla arrumbada
tres patas te sostienen,
pobre coja,
de maderas
desvencijadas
Aquel esplendor, de
pátina roja vestido,
hoy yaces desvalida,
sin uso.
Descascarada
vencida.
Contra una pared
de mugre y pasado
olvido.
Esperas paciente el
hacha verduga que
astille y vuelvas al
rojo crepitante.
Perdido.

 

Me relaciono en el sentido que a veces se siente uno asi, una desvalida en contra la pared de la vida,
siempre es un placer dejar mi huella en sus letras,

 

Querida Lupe¿puedo mencionarte asi?
Me alegras la mañana con tus comentarios,
De eso se trata te comunicas conmigo y vice-
versa,Abrazos mil...Y gracias,muchas gracias.