Nacer para morir

Maldito el pensar
Que al alcanzar profundidad,
Obliga a reflexionar,
Uno nace por casualidad,
Y al despertar, empieza muriendo.

Se siente la necesidad
De alcanzar cierto anhelo,
Un balance entre luz y oscuridad,
Estrechar la distancia entre el cielo y el suelo.

Desequilibrándose las palabras, apoyadas desde un filo,
La difícil verdad de estar a un paso del abismo,
De un segundo a otro todo cuelga de un hilo,
Se llega a un punto en el cual, cada acción causa un sismo.

Entonces, triunfando o fracasando,
Damos un paso más hacia el final,
Serán las decisiones que surjan al seguir caminando,
Las que dejen huellas en los destinos escritos sobre el cristal.

 

Excelente poema amigo. 17 años... qué asombroso, de verdad. Poema y contenido, sinceramente estupendos. Felicidades.

PD. no es necesario que me pagues el comentario con otro comentario. Mi mensaje obedece a la buena impresión que me provocó tu poema y nada más.

 

Muchas gracias por tu comentario Melquiades, con esas palabras, es necesario responder , un abrazo.

 

Buen poema con buenas rimas,espero una segunda parte.....grato leerte.un saludo.

 

Celebro tu talento amigo, mis estrellas.

 

Muchas gracias ludmila, un abrazo.

 

Gracias por tu comentario, saludos.