Odio el futbol

ojicafes · 15 de Septiembre de 2011

DAMAR BOREALIS dijo: ↑

Odio el fútbol

El jueves por la tarde recibo tu llamada
y tiemblo de emoción;
presurosa elijo el atuendo
una minifalda,
blusa roja, un sostén que descarto de inmediato
y una tanga negra que ha cosechado aplausos,
y lo completo todo con el boato y las esencias de Channel.

Puntual acudes a mi encuentro
y veo en tus ojos un brillo casi demencial,
-supongo de pasión-
y una vez en tu coche (prestado por cierto)
haces gala de prisa y de buen conductor,
todo eso me hacia suponer una noche genial
y al preguntarte a donde iríamos, me dices es sorpresa
y empiezo a sentir cierta humedad.

Cuando llegamos a ese sitio
realmente quedo sorprendida,
en lugar de las cinco letras usuales,
veo un letrero luminoso bar
y abajo en letras negras:
hoy fútbol
¡vaya sorpresa!

Una vez adentro, lleno hasta el tope de hombres
y unas cuantas chicas despistadas
o lo suficientemente enamoradas
para compartir ese rito bestial,
llagamos a donde tus amigos
y ni todas mis sonrisas, ni el fuego de mis muslos
fueron capaces de hacerte despertar,
me recargo en tu hombro
para que sientas de mis pechos la dureza
y me retiras ante la inminencia de un gol.

Así veo pasar los minutos, las cervezas
y el disgusto de que cambies lo suave de mis piernas
por tu mirada absorta en cuarenta y cuatro, cierto,
pero feas y peludas;
y cuando creo que el martirio ha terminado,
ingenuo y estúpido me dices:
esperemos que el segundo tiempo sea mejor.
Así que teniendo como reto quince minutos para seducirte,
retoco el maquillaje, ajusto la blusa y dejo que la mini
se vaya mas arriba, pero oh, tonta de mi,
pues los quince minutos fueron solo
para deportivos comentarios, la magia de la repetición
y tu asombrosa estrategia, para la segunda mitad.
Cansada y aburrida, decidí coquetear con el mesero
que al menos de cuando en cuando
se acercaba a la mesa
a surtirte de cerveza y dejaba sus ojos en mis muslos;
por puro orgullo femenino
cambio la estrategia e inicio el contraataque,
poniendo tu mano húmeda y temblorosa
en lo blanco de mi muslo,
solo para recibir un cruel apretón, cuando el balón
se va al travesaño y tu equipo se queda con las ganas
de festejar otro gol.

Decido ignorarte y llenarme de cerveza,
total, no hay peor afrodisíaco que un partido de fútbol.
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Que mal por ese cuate, por mucho que le vaya a los pumas , mejor meto un gol, o varios pero con ellla, que pend... ese cuate, deveras.... teniendo el marco abierto, pura pifia, ni un tirititito te dio.... besos de consuelo..

DAMAR BOREALIS · 15 de Septiembre de 2011

ojicafes dijo: ↑

Que mal por ese cuate, por mucho que le vaya a los pumas , mejor meto un gol, o varios pero con ellla, que pend... ese cuate, deveras.... teniendo el marco abierto, pura pifia, ni un tirititito te dio.... besos de consuelo..
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Si hay cada imbécil, en fin ya cuando menos quede avisada y no volveré a caer en sus garras.

besitos

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