¿Para que preocuparse?

¿Será cierto o será falso?
De muchas partes llegan
señales de que ya están,
pero ni siquiera sabemos
si aquí han venido antes,
si son invisibles,
o si vienen de casualidad.

Preocuparse no tiene sentido.
Si vienen a destruirnos,
ni nos vamos a enterar.
Un mega golpe electromagnético
que paralice el mundo,
nos deja sin electricidad:
nos comeremos entre todos,
los que queden viviremos en cavernas
y ellos, sin tirar un tiro, se pueden marchar.

Prefiero pensar que vienen
para aprender muchas cosas,
porque no saben besar,
porque el sexo, no es el sexo,
porque no pueden ni hablar.
Todo lo hacen telepáticamente:
no necesitan un móvil;
no necesitan pensar;
son más sordos que una piedra;
sus vidas son aburridas,
no saben ni enamorar,
y señores,
pongamos los pies en la tierra:
telepáticamente,
¡el sexo nunca es igual!
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Frank Calle. (29/ julio/ 2023)