Placeres cotidianos

Lo reviso, gracias.

 

Mira qué casualidad cuando he leído tu mensaje venía de ponerle la diéresis al diario.
Es que tal y como me suena a mí en este verso el separar di-a- rio, me sonaba mejor que leerlo como dia-rio. Pero olvidé ese signito que no me gusta nada colocar.
Pero si hay que ponerlo, se pone...
Gracias por estar tan atento, que ya sabemos que tú también eres "Ojo de lince", y eso no es hacerse el listo, sino serlo.

 

Pues eso es ser poeta. Íntimo, refinado, como dices, con ese toque mágico que eleva las cosas cotidianas. El roce de las yemas de los dedos sobre la porcelana. ¿No serán tus dedos de porcelana también? Desde luego has desempolvado el arpa sacándola del ángulo oscuro con este soneto.
Te agradezco esa finura de espíritu.
Con mi abrazo.

 

Muy bonito, profundo, sensible y sin sensiblería. Así debe ser la poesía. Vamos a darte un aprobado.
De nada.

 

Te admiro muchísimo Era, tienes un personal estilo,que reconocería entre todos los poetas del mundo,si no llevara tu nombre marga

 

Y yo te agradezco tan bellísimo comentario.
Un abrazo.

 

Muchas gracias, amigo mío. Me congratula ve que te gustó.
Saludos cordiales.

 

Jaja, siempre tan ocurrente y tan amigable.
Con todo cariño.

 

Me ha encando tu soneto, natural y delicado, simple y bello una maravilla, llena de razón. ¿Qué sería de nuestra existencia sin las pequeñas cosas, que tan felices nos hacen? Un abrazo compañera.

 

Si tiene todo eso y solo se merece un aprobado... ¿Qué hay que hacer para conseguir un bien? Menudo profesor rácano habrías sido tú. Mu bonito, mu bonito... pero te doy un cinco. Vamos, que no me has suspendido por los pelos, y menos mal porque estar suspendida por los pelos debe doler muchísimo...
Gracias.

 

¿Hacemos una prueba?
...

Muchas gracias, preciosa.
Un beso.

 

No sabes lo que me alegra verte por aquí.
Te agradezco mucho tu bonito comentario.
Un abrazote.