Por qué hombre necio ignoras la Paz.

Por qué hombre necio ignoras la Paz.



Si somos pizcas del mismo arenal

quien no desea en este planeta

convivir en paz.

Si siguen se intuye lo que vendrá.

Azotarán los vientos; calamidades habrá...

De a poco se irá sintiendo la furia natural,

pronto, verán las aguas arrasar...

La perfección no existe, sí la humildad,

la generosidad, la bondad, la honestidad.


Sembrando secretos pasaron los siglos.

Usaron los cambios sembrando el horror,

sin pensar que pronto llegará el final.


Castigo no es lo que sucederá...

Es la cosecha del hombre del mal

jugando inclemente con el bien sembrado.

Borrando del cielo el color del mar;

arrasando impunes hectáreas de bosques,

impenetrables selvas. ¡Necios prebostes!


Quien absorberá dentro de su seno

la masa cuantiosa de los deshielos;

quien, sin protección del gas, el veneno

podrá soportar arrojado desde el cielo.

Hombre, al destruir la naturaleza

has ignorado su inmensa grandeza.


El mundo se estrechará, las lenguas secarán,

cuando arenas del desierto cubran,

en algunas, movedizas, sucumban...

Cuando el caos comience, las puertas cerrarán

al temblar el planeta, no escaparán...

La naturaleza, prodigio divino de bondad,

convertida por el hombre se vengará

tragándose a la Humanidad.


¡Tú, Madre Tierra has dado belleza y amor!

A todo el que asuela lo has de juzgar.



Matilde Maisonnave


12/ 2000

 

Tu trompeta de atalaya hoy da gritos de batalla contra la dejadez de los que pueden cambiar las cosas.

Un llamado al continuo contaminar de nuestra casa, la tierra. Que te oigan los sordos de espíritu, los débiles de amor por la naturaleza...
Si, que te oigan y accionen a favor de este llanto.

Excelente matilde
Saludos lex

 

¡Muchas gracias querido amigo Lex por escuchar este grito, que no es ni para ciegos,
ni sordos, ni mudos!
Estoy cansada de leer amores de pareja... Sufren, lloran, se quejan, se quieren matar...
Estas letras han sido ignoradas por años y así seguirán...

El hombre piensa: ¡-A mi no ha de tocarme-!
Hasta que se le derrumben los sesos por ignorante.
Cuando lo escribí, hacía 10 años que había comenzado a revelarse la maldad en todos
los ámbitos: el deporte preferido era matar focas bebé; asesinar miles de delfines que
emigraban a Japón; devastar bosques; invasiones genocidas...

¡Gracias por inaugurar este poema de una realidad actual!

Un abrazo afectuoso.
Matilde