Quintillas quincalleras quizás quemen quilos

Con sus manos y la arcilla
se gana el pan Salvador
parece cosa sencilla
pero verlo es un primor
¡vive Dios, que maravilla!

 

Su vasija maravilla
al turista ricachón,
quien no entiende la razón
de manos hechas papilla
por la eterna desazón.​

 

Solo sientes desazón
si has cometido un error
y no has tenido el valor
de ofrecer compensación
por orgullo y por temor.

 

Callarse por el temor
de dar a otro la razón
en política es canción
que se convierte en error
por seguir la cerrazón

 

Tememos la cerrazón
si el concierto se interrumpe
sin terminar la canción
porque ocurre una explosión
pronta la avalancha irrumpe

 

Recuerdo aquel “¡atención!”
del servicio militar,
que fuera una obligación
muy difícil de evitar
en tiempos de sedición.​

 

Esto de la sedición
es hoy día muy moderno,
es de algunos condición
cuando falla su gobierno
al perder su posición.

 

Conseguí la posición
con mi método habitual
que he convertido en ritual
porque un ligero empujón
no le sienta a nadie mal.

 

Lo que sí me sienta mal
es la deuda que contraje.
No luciré ningún traje
si no lleno su costal
y no respaldo el ultraje.

 

¡Véase tamaño ultraje!
De un archivo ultrasecreto
dice es dueño por decreto.
Trump nos luce un maquillaje
naranja porque es coqueto.

​

 

Referente a ser coqueto
podemos poner escuela
pues nos queda una secuela
que ya no admite más reto
¡y no se llama Manuela!

 

Ha sido gestión nefasta
lo de pactar con extremos
y sin poder, no podemos,
y sin estar, ya no hay pasta
¡mira que hemos sido memos!

 

Del carro tiran los bueyes,
igualito que los reyes,
luchadores generosos
por su pueblo y por sus leyes,
cetros fríos y onerosos.

 

Siempre dejaron resecas
las arcas de nuestra Hacienda
¿las gastaron en muñecas,
o se las llevó algún menda
y se escondió en la Batuecas?

 

Recorriendo Las Batuecas
encontré pinos y encinas.
Vagué por las cuatro esquinas
del mundo y las vinotecas
de razas grecolatinas.​

 

Leyendas grecolatinas
en hazañas imposibles
se libran duelos terribles
damas de castillo en ruinas
salvan, de monstruos temibles

 

Dejas tu quintilla en ruinas
Amigo Pi, con tres versos
que tienen rimas genuinas,
quizás demasiados tersos,
los tres las mismas esquinas.

 

Acudí a armas genuinas
he permutado los versos
que en derechos y reversos
ofrezco iguales rutinas
sin resultados adversos

 

Mientras Pi radianes piensa
voy a buscarme un bocado
y vacío la despensa
porque mañana hay mercado
…y renovar me compensa

Esto es un alto en el camino… seguid con lo que Pi termine. Saludos veraniegos a todos los partícipes.

 

Estos son ritmos diversos
que Bernardo se merienda
la quintilla y en la tienda
nos da saludos perversos
siempre que nadie se ofenda.

 

Por algo somos mayores,
al menos el que esto escribe,
de ahí que con mil amores
sabemos quién nos recibe
en su casa con honores

 

Hoy le rendimos honores
a la quintilla traviesa.
No es una estrofa burguesa
ni el manjar de tus amores:
es pollo con mayonesa.​

 

Llegar a la sobremesa
después de haber trabajado
siempre es una gran sorpresa
si son amigos de agrado
¡siempre quedará una fresa!

 

Sobre el mantel una fresa,
la de la inmensa sorpresa
de un pareado ilegal
en la quintilla al final
que no ha resultado ilesa.