Quintillas quincalleras quizás quemen quilos

Quien se sueña gobernando
sabrá que debe ceder,
deseos de poseer
ceder el bastón de mando,
y la ley siempre leer.

 

Es conveniente leer
como una sana rutina.
Yo siempre le tuve inquina
a quien se intenta esconder
en su ignorancia asesina.​

 

Tiene mirada asesina,
por encima del bigote.
Y yo pido al cachalote
que se olvide de la inquina
y deje que el voto flote.

 

Yo fui quién tomó la plaza
de Audrey Hepburn en el mundo;
compararme me embaraza
mas nací el mismo segundo
que marchara en la barcaza.


​

 

Audrey no se fue en barcaza
porque era una emperatriz,
la carroza era su baza
y aún nadie la reemplaza
en lo de diva y actriz

 

¡Cómo les gusta esa actriz
en las comarcas de España!
Han montado una campaña
para el recuerdo feliz
de su belleza tamaña.​

 

Si el femenino es tamaña
el masculino es tamaño
¡cuidado no te hagas daño
al subir a la montaña!,
que siempre que voy me araño

 

No he de pensar que me araño
o que no tengo cuidado
que lo que me lleva a engaño
y sé que no les regaño
son las gatas del tejado.

 

Como gata en el tejado
te comportaste ese día.
Mi llegada fue tardía
y por muy atolondrado
me perdí la gran orgía.​

 

Al llegar tarde a la orgía
me encontré, por descuidado,
todo el mundo emparejado;
suerte que una amiga mía
me invitó a su reservado.​

 

...pero un hombre reservado
me increpó con un sermón.
Se me cayó la pasión
por un frío acantilado.
Ya no busco un revolcón.​

 

En mi tierra un revolcón
era una cosa jodida
un suspenso con razón
y no dar por conseguida
tu anhelada graduación

 

Nos hacen falta eruditos
como Miguel de Unamuno
que hacía bien sus escritos
y nunca fue inoportuno
ni tampoco daba gritos.

 

Borges no daba gritos,
mas supo ser pedante.
Del Nobel, concursante
y entre los favoritos,
pero nunca triunfante.​

 

Dijo un poeta triunfante
que hilaba versos divinos,
a la sombra de unos pinos
con el fulgor de un diamante,
embriagado en dulces vinos.

 

Yo me sumo a ese “prefiero”
por más que alguno muy fiero,
confesado Dios me coja,
no me trate con esmero
por no preferir Rioja.

 

Riojano creo era el vino
que compré para el asado.
Creo que carne ha sobrado,
pero al vino, no le atino:
treinta litros se han tomado.​

 

La selección generosa
de vinos nunca alcanzó.
Si bien carne nos sobró,
con el vino era otra cosa:
todo el mundo se bebió.​

 

El que vino no bebió
creyó que estaba más cuerdo
pero lo que fue es un lerdo
y el solo…se lo perdió
¿Estamos o no de acuerdo?

 

Aunque el discurso acabara
a tiempo para el café,
yo jamás me detendré,
ni en un polo o el Sahara,
a aguantarle este tupé.​

 

Aquel cabo del tupé
que era un nazi y un fascista
se comió algún canapé
pero vino un comunista
y lo dejo hecho puré.

Hacer puré a alguien o algo
Loc. verb. coloq. hacer papilla.

 

Yo casi me hice puré
con mi Fitito 600*.
Hoy recuerdo los lamentos
que a mi madre le causé.
Fueron horribles tormentos.​

* El "Fitito 600" (Fiat 600, creo que Seat 600 en otros lares), era casi una institución entre los jóvenes de casi veinte de modestos recursos. Te llevaba a todos lados con muy poca gasolina, pero el motor era una tetera: levantaba temperatura muy fácil.

​

 

Muchos fueron los tormentos
que tuvieron que pasar
a costa de trabajar
y cumplir sus presupuestos
de carácter familiar.

 

Me resulta familiar
ese tipo de asonancia,
pues siempre dejo constancia
de algún error similar.
Te lo digo sin jactancia.​

 

No ha lugar para jactancia
si se dice con respeto,
comprensible por vagancia
ese error en la asonancia,
en verano y en asueto.