Sonido púrpura

Muchísimas gracias Maldonado, haces que me den ganas de retomar.

Un abrazo.

Palmira

 

Por fin tengo tiempo de comentarlo, y no sé qué comentar, me dejo muda cuando lo leí, muda ahora que lo vuelvo a leer... Entiendo literalmente lo del universo y abrazarse bajo el cuerpo no reconocido... Rayos.

Smuuuuuuuuuuuuaaaaaaaaaaaaaaaks!

 

Tu obra es tremenda, se abre a un infinito incierto. Por poemas como este es que adoro el surrealismo, lo empuja a uno a un vórtice de facetas.
Abrazos Enormes. Lo guardo para una segunda lectura, y tercera, y cuarta...

 

Ahora que te pienso, la primera vez que tuve en mis manos un bebé erizo me impactó la suavidad de sus púas, será que la vida hace que todos los caparazones se endurezcan..., quizás, aunque algunos seguís mostrando una enorme sensibilidad.

Un abrazo con cariño.

Palmira

 

...Y centellas!
Otro renacer de las tinieblas...

Smuaksss querida niña.

 

Mascullando en mi interior la calle se diluía,
la noche germinaba espectros cual sombra mía;
dudo que sea un sueño que al escàner ocultaré
no vaya a convertirme en presa o presa quedaré;
desgastado y/o desganado espero la luz del túnel
a ver si me atropella el tren o soy nota en un panel.
Entre luces y sombras internas y externas caminamos sin saber muy bien a donde.
He disfrutado releyendote esta perlilla que encaja descolocada.
Felicidades amiga.
Imagen de Vladimir Kush

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Proclama la calle juegos de gris equilibrio

mascullando en mi boca

silencios con amargo recuerdo.

Una noche interminable reabre entre sombras

mi propio universo.

Bajo un cuerpo que no reconozco, que me abraza,

…me gesto.​

No echo de menos la prudencia inclinada

al descifrar las llagas de una historia que jamás

será narrada...

Se repite la incertidumbre.

¿Será esto aún un sueño? ​

Felinos acechantes de copas, crepúsculo siniestro…

Mariposas lumínicas festejan a ese ser

que me hipnotiza.​

El paisaje se agota,

anhelando transformarse en una obra de Kush.

Otra noche de plomo vestida con toquilla

navega por mis huesos ya vacíos

despojados para siempre de plañideras

con candiles en los ojos y lágrimas de cera.


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Siempre tan ingenioso caballero, me encanta el modo en el que creas a partir de lo que lees. Gran abrazo Kique!!

 

Siempre la noche, en su cadencia de sombras, en el quiebro de los silencios en ruidos que espantan por un momento. Jaurías que recorren las calles, remedo de hombres, animales hambrientos, con sed que no se sacia, con amores que no fecundan el pecho. En esa noche que pintas, me pierdo sin remedio. ¡Qué versos profundos y cuánto sentimiento! Un beso. Luis.

 

Por lo que estoy leyendo de ti, veo que disfrutamos de ese dejarse mecer por las palabras y los sentires, como sin rumbo...sea cual sea la orilla en la que se fragüe la vista o la piel.
Veo también que rescatas reliquias que aún sobreviven a los naufragios del tiempo. Gracias por ello. Un abrazo Luis.


Palmira

 

Mi estimada Palmira: Falto temporadas del portal y cuando vuelvo, encuentro siempre poetas que hay que leer, que seguir con interés y así, rebusco a veces en el tiempo y encuentro joyas como la que he comentado. Un cordial abrazo. Luis.

 

Muchas gracias por tus valoraciones Luis, me alegra mucho compartir contigo.

Un abrazo,

Palmira

 

No echo de menos la prudencia inclinada

Me quedo con ese verso, germen quien sabe de qué cuando caiga dormido, realmente me ha encantado todo el poema. Abrazar a quien te abraza quizá ese sea el secreto de la vida y la felicidad. Saludos.

 

La fortaleza del abrazo enriquece y además contrasta con la prudencia inclinada, que es más un sometimiento de conducta. Muchísimas gracias por acompañarme y hacerme recordar.

Un gran abrazo

Palmira