Te quiero.

Te quiero,
aunque no quieras que así sea.
Me sorprendes porque naciste bella y sincera.
Alumbras mi mañana cuando aún no has despertado,
y me acaricias con tus miradas.
Mi piel se eriza ante tu sola presencia,
aunque no sepas que así sea.
Sueño despierto en la mañana,
duermo en el día para soñarte.
Gritas al viento,
escuchas el eco que te devuelve mi alma agradecida por haberte conocido.
Te quiero,
aunque desearas que asi no fuera.
Porque luchamos por una amistad sincera,
pero yo solo sueño en besar,
los labios teñidos de rojo pasión,
que envuelven a tu sonrisa.
Quédate siempre en mi vida,
no te escapes, ni te ausentes demasiado.
Te quiero,
aunque nunca lo dire para no perderte.

 

¡Uy!!! La amistad verdadera... no la arriesgues. No vale la pena. Me ha pasado que mezclé amistad con amor... una vez hace mil años ... y se perdió todo.

Que bien tu escrito! Saludos

 

Que hay de todo en nuestras vidas... sin lugar a dudas... me ha pasado que he tenido
que guardar silencio, para no perder una amistad realmente valiosa. Cosas de la
vida. Buen tema, Escritor..

 

Una declaración muy hermosa y un dilema también. Un placer leerte

 

Silenciosa confesión que arde en el alma amigo...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy