Temblando ante el decreto

Te dejo la noche,
cargada de pasiones.
El alba y los remordimientos,
las ganas de besarte...,
la niebla que invade rincones compartidos.

El tacto de tu roce,
la hirviente saliva,
la descarga de tu encuentro...
Todo te lo dejo.

¿Si estoy triste?
...No.

Te dejo.
Soy libre.

​

 

Fascinante escrito Assane por la reflexión que empuja al lector, el amor es como esa niebla que invade los rincones compartidos, a veces nos ciega hasta tal punto que no sabemos si el amor nos hace libres o nos encadena y hay que saber asumirlo. Te dejo estrellas para que, al levantar el vuelo la niebla, puedas ver la luz de tu firmamento.

 

Miles de abracitos para ti!

 

Me encantó esta poesía; la introducción que encarrila hacia la profundidad de una apasionada entrega y el desenlace que toma por otra vía, con un exquisito e inesperado cierre. Excelente.

Saludos

 

Gracias amigo.
Un abrazo

 

Hermoso, una preciosura.

 

Muchas gracias!
Un abrazo