Tercetos encadenados

Me muevo rápido, con tanta prisa
corro, volando y brinco
me enfado, porque a todos les da risa

 

Trabajo con ahínco,
de sol a sol labrando mi parcela.
Quisiera trabajar de nueve a cinco.
​

 

Estimado Maramín:

A menos que “bongo” sea un coloquialismo o neologismo en España, el "bongó" es el instrumento de percusión y el "bongo" un tipo de embarcación:

bongo

De or. africano.

1. m. Especie de canoa usada por los indios de América Central.

2. m. Ven. Embarcación grande de fondo plano que se utiliza para el transporte fluvial.

 

La tristeza, de noche va y se cuela,
aunque yo escuche música de arpegios
y alumbre el comedor con luz de vela.

Pues no vienes ni aún con sortilegios
no importa si te espero perfumada.
De tus poemas hago florilegios.​

 

Es tu naturaleza
argumentar zonceras sin cansancio,
mas me las tomaré con ligereza.​

 

Fue en avión mi primer viaje por Cuba
y bailé guaguancó al son del bongó.
Me dicen que esa danza es son yoruba.​

 

Francia contra Inglaterra:
¡partidazo se viene, caballeros!
Que brinden espectáculo, no guerra.

 

Trajín descomunal
el de Croacia fue con los nipones,
quienes no son expertos del penal.​

 

Si todos los caminos
nos conducen a Roma, reza el dicho,
¿dónde está el puente para los andinos?​

 

Si mencionamos “hercios”,
nos basamos en ciclos por segundo,
pero en las radios usan kilohercios.​

 

La radio que hoy se escucha en todo mundo
es medida en megahercios, F M,
tiene sonido claro y más profundo.​

 

Pegadizo, recuerdo aquel, Do Leme
ao Pontal, nao há nada igual machacoso
de Tim Maia. Al cambio se le teme.
​

Se usaron los diptongos tal cual suenan en portugués (creo).

​

 

Me llena de alborozo
pensar que pronto viene Navidad
para mí, cuando niña, era un gran gozo.
​

 

Con incredulidad
observo el consumismo navideño,
celebración de la banalidad.​

 

Él encendía un leño,
en el norte el invierno siempre cala,
el ponche con alcohol quita el sueño.​

 

Fue mariposa, leve
en su presencia, y de un multicolor
roce que por efímero conmueve.​

 

El beato inició el peregrinaje
con un pan y en sandalias, muy sencillo.
La simpleza no impide el gran coraje.
​

 

Pensé, no tiene brillo
el verso que escribí recientemente
ya no puedo escribir ni algo sencillo.​

 

Imperturbablemente,
flota el alma del muerto en el velorio.
Descubre falsedad en cierta gente.​

 

El libro que leí; Don Juan Tenorio
disfruté de aventuras
con enredos de amor y dormitorio.

 

Las desempolvaduras
del desván y unas fotos ya amarillas
nos recuerdan un tiempo de locuras.​