Tributo a mis ancestros I (El costo)

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No fui un cisne gratuito;
costé sangre, soledad, alaridos
injusticia
terror
dolor y muerte

odio
hambre
suplicio
tripalium

y látigo
cepo
sed
fiebre
herida,

angustia
espada
combate
desesperanza.

Soy hijo de la violada
Del acribillado soy hijo.
Del amo maldito
y de la nativa.
Del cañaveral y el río
y de la mar
y del antiamor soy tan hijo
y de la sangre rota
y apenas un poquito del amor
también soy hijo.

Este es un canto a mis madres deshechas luego de tenerme
a mis padres que claman
sumidos en la tierra.

Porque tal fue el costo que pagaron
inexorablemente.
El costo terrible de estos no-versos.

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Diciembre y fuego, 2019. César de color negro​

 

sí. somos hijos del horror y de la sangre, césar. por eso lo que hagamos en su memoria es tan importante como una noche llena de estrellas.

salud.

 

Épale, Bris. Gracias por acercarte, amiga. Venimos de tanta vaina que nadie quiere recordar, ni aceptar. Y me pregunto dónde queda el sacrificio de quienes eligieron darle una oportunidad a la vida, aun en condiciones que para ellxs fueron de horror, absoluto dolor, desesperanza y muerte. Por ellxs estamos aquí hoy. No, no somos simples accidentes. Somos el continuo presente de decisiones ancestrales inquebrantables por la vida.

Gracias por tus palabras, y buena navidad también para ti.

 

Cisnes, mi pana. Cisnes-lirios hechos de determinación por la vida. El viejo Benedetti diría que "Con su fe veterana, el sur también existe".

Gracias por tus palabras, hombre.

 

Simplemente un emotivo beso en la mejilla de la joven que entendió lo que decía este no-poema.

Que tu domingo y tu vida sean perfectos, Poeta con Alma de Lobezna.

Un sentido GRACIAS.