Tristes coplas

¿Qué poder tendrán tus ojos?
¿Cuál, la lira de tu boca,
o la aguja de tus dedos
que en mi espalda se desborda?

Al hechizo de tu voz,
escondida en cada estrofa,
encadeno los latidos
a tus labios de amapola
y deshojo con la lengua
de este río que me colma,
rojos ecos de un te quiero
que repite hasta mi sombra.

¿Dónde quedan hoy los sueños
que mecían tus auroras?
¿Si contigo te llevaste,
¡vida mía!, el alma toda?

Ora el valle de tus brazos
se reviste de otro aroma
destilando su opio embrujo
la naciente belladona.
La imagino, allá en tu cauce,
retoñando fervorosa...
¡Vil y huída primavera
de mis besos desertora!

Nomeolvides brotan mustios
donde los cipreses lloran,
en mi cruz la mala hierba,
bajo ella quien te nombra.

Vuelve tus ojitos verdes
a lo gris de esta congoja
que el poder de tu mirada
mis quebrantos pone en solfa.
Reinvéntame en el aire,
¡seca el llanto gota a gota!
y calcina los guarismos
de estas tristes, tristes coplas.
​

 

la tristeza que escriben ellas es dolorosa, besos

 

de estas tristes, tristes coplas
me quedo con esto... Formidable.
Saludos,
Guderio.

 

Muchas gracias querida Marian,
un fuerte abrazo

 

Me alegro que te guste,
un abrazo

 

Acarreando la belleza, pasan coplas de tristezas. Un encanto tu versar Eva, le encuentras a las palabras el lugar justo para enarbolar una preciosa obra, besos querida amiga adorada.

 

Tristes en verdad, Eva.

Sin embargo poseen una belleza peculiar y llamativa.

Gracias mil por compartir tu inspiración.

Un abrazote.

 

Buena pregunta que revienta en cada verso

¿Qué poder tiene, si está lejos
para que vibren sus notas
en cada fibra de los huesos?

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Hermosa poesía
y el amor pincela de añoranza
la geografía y sus secretos.

 

besos Chris,
voy necesitando una partidita de ajedrez!

 

¡Qué preciosidad!
Tiene tanta belleza cada verso que has escrito. Me ha encantado.
Muchos besos