Un accidente urbano en el transporte público

Corre corre belleza a galope
de arena

tus ojos,

los de siempre ​

aquellos

los de ahora;​

los salteados, los entreverados
los hallados entre la noche ya tejida
los que cuelgan a la espera de sombra
los que corren cuando tiritan
las hojas voladas
de tanto insomnio cerca de mis pasos,

aquellos antes del freno

junto a los míos en los espejos,

fue cuando el Amor se dejó volar
sin permiso
con su faldita amarilla, con sus guantes de seda
con toda la ropa encima
también con las ceremonias y visitas

desnudos
el cuarto es una caja sin piel

los autobuses, la música,
los tristes etcéteras

sin piel...​

pero
Corre corre belleza a galope

porque hoy vi gente volar
gritar de tanta nada

y me prendí un pensamiento
de aniversario

-¿Señora se encuentra bien?
- Quizás mañana no me duela tanto...

Nuestros ojos son tan insignificantes en el vuelo

en el choque aritmético contra el viento

que mañana tendremos otras dos noches más

bajo nuestras frentes...