Un poema innecesario...

Este estado de cosas en estado de guerra
no conduce a ná bueno;
este amor por lo ajeno,
este juez comunista
que al que trinca lo indulta y al que tose lo encierra;
este culto al inculto,
esta rata buscando en Hamelín un flautista
que apacigüe el tumulto…

Este viaje sin tregua con destino a quién sabe
qué rincón del infierno;
este vicio moderno
de esconder la cabeza
y cerrarle las puertas a la vida con llave;
este coto cerrado,
este margen de dudas, esta incierta certeza
de haber sido engañado…

Esta infame vagancia reclamando un subsidio
para ver de ir tirando;
este cura rezando
con el diablo en la minga;
estos tontos del culo del “procés” en presidio
malmetiendo y jodiendo;
este mundo cargando contra mí su jeringa
porque no le comprendo…

Este amor por sí mismo que con todos se acuesta
y con nadie se casa;
este darnos la brasa
con los putos rebrotes,
que por más que uno aparte las narices, ya apesta;
este gran despilfarro
que enriquece a los ricos y a nosotros, machotes,
nos enfanga en el barro…


Estos gélidos huesos que conduce el hastío
-sin piedad ni criterio-
rumbo a algún cementerio
de cualquier ningún lado;
esta necia costumbre de saltar al vacío
sin mirar si está lleno,
y este afán de morirse sin haber aun sacado
las pezuñas del cieno…

 

Los ojos se acostumbran a ver en la oscuridad y luego con un poco de luz ya te quedas ciego.
Un abrazo, Jorge.

 

Cierto, Sergio, así ocurre.
Oye, que igual no era tan necesario. Me precipité...

 

Muy bueno !!! Un gusto leerte.
Saludos.

 

Un poema innecesario dice el tío, ¡enga ya! Lo que es innecesario es el resto del cuadro. Cualquier mancha paredes es un pintor.
No dejes de hacer lienzos como este, que no estás solo, y que le den al que no sepa mirar.
Aparte de garabatos y mamarrachadas de esas, gran parte del personal, no sabe de otra cosa, así estamos.
Tengo que ponerme un día con esta estructura, alejandrinos y heptasílabos, un tanto alirados; creo que es una combinación de tu invención. Suena realmente bien.

Te felicito.
Seguimos.

 

Gracias, ángel. El gusto es mío.
Saludos

 

Gracias, amigo. En un principio lo titulé "Un poema necesario" luego me lo pensé mejor, jajajajaja.
Bueno, estamos como estamos, y con esto es con lo que hay que lidiar, aunque ciertamente me hubiera gustado nacer en el siglo pasado.
Me encantaría leer un poema tuyo con esta estructura, a ver cuándo me das esa sorpresa...
Se taprecia, Manolillo