Una ciudad que me pone firme.

Después de un largo viaje,
vuelvo a casa, amigos míos.
Barcelona, mi equipaje,
el puerto y el deporte, bellezas sumergidas.


Restaurantes singulares.


Ciudadanos humildes.
Gente que va y que viene.
Al paso, al trote, ¡ Al galope !
Por siempre, equidistantes.


Universos paralelos, al unísono.





No se mezclan, ¡ No se vierten,
los unos en los otros !
Se divierten, mas no se pervierten.
Diversidad es Amor, y no debemos discriminar a nadie.


Ni siquiera a nosotros mismos.


Avión, raudo como el mesmo viento.
Me santiguo, me encomiendo
al corazón generador blanco-azulado.
Valedero para el salto con pértiga,


el salto de longitud, y cualquier santo o Bodhisattva.


Pues ya está bien,
de tanto contemplar el Big Crunch final del Universo.
Caray, ya está bien de Nirvana.
¡ Amor en acción ! Eso es Servicio.


Barcelona...