Una rosa en la mañana

Miraba muy temprano en la ventana
al jardín de la casa iluminado
cubierto del rocío aún helado,
regalo de la noche a la mañana.

De repente la vista sin desgana,
absorta en un rincón fresco y callado,
volaba hasta el capullo que cerrado
era solo un presagio color grana.

Pensé en la madrugada generosa
que deja algunas veces una rosa,
sorprendente matiz del nuevo día.

Y fuera que en la hondura de mi abismo
oí como un mensaje de Dios mismo
pues solo para mí la flor se abría.​

 

Ayyy Salva, mensajes de amor son todos y cada uno de los momentos de contemplación de las maravillas de la Naturaleza, todo encierra algo divino, milagroso, en su esencia pura, ayyy cuánto se puede aprender de todo lo natural y sencillo, ... Tus maravillosos versos reúnen la magia del misterio y la profundidad del pensamiento... Encantada de leerte siempre mi entrañable amigo.....muáááááacksssss....

 

Así es querida Isabel. Esos mensajes que nos recuerdan que estamos vivos entre esas pequeñas maravillas que se nos regalan.
Muchísimas gracias por tu valiosísima compañía que en este tema valoro, si cabe, aún más.
Un fortísimo abrazo con todo mi cariño.
Salva.

 

Me ha gustado mucho este soneto en el que se recoge un momento fugaz en una descripción emotiva.

Creo que una coma entre iluminado y cubierto no vendría mal, pero no va más allá con el parón del verso se hace la pausa.

La perspectiva que el poema abre al final es lo que me ha hecho pararme a releer y comentar, me has transmitido el mensaje de modo elegante y preciso.

Un abrazo, Salvador.
Oncina.

 

Realmente un enorme placer leer este sonteto maravilloso, Salvador! Me encantó.
Te dejo un fuerte abrazo.

 

De nuevo un gusto pasar por tus letras,
lo eterno de un instante...
suscribo las palabras de Oncina.
Me ha encantado. Recibe un saludo cordial y mi admiración

 

Hermoso soneto, Salvador, en el que describes, con todo el bello lirismo que te caracteriza, ese milagro que la naturaleza te ofrece al amanecer con esa rosa que se abre como se abre el nuevo día ante tus ojos.

Mi felicitación, amigo.

Saludo cordial.

 

Si lo vieras en medio de una calle atestada, seguiría siendo sólo para ti. Saludos cordiales, Salvador.

 

Muchísimas gracias, querido compañero, por acercarte amablemente a este espacio con este comentario generoso. Efectivamente, como señalas, falta una coma que podré inmediatamente.
Con un fuerte abrazo te van mis afectos.
Salvador.

 

El placer será siempre mío de recibirte en mis espacios, querido angelcesar. Celebro que hayan resultado de tu agrado estas letras mías.
Con todo afecto, un abrazo fuerte.
Salvador.

 

Mil gracias, querida compañera, por esta presencia tuya y este amable comentario. El gusto será siempre mío de recibirte.
Con todo afecto va mi saludo muy cordial.
Salvador.

 

Muchas gracias, querido Juan Ramón, por acercarte a estas letras dejando este valioso comentario. Celebro hayan resultado ser de tu agrado.
Te envío u abrazo fuerte y fraterno.
Salvador.

 

Tienes razón, estimado Sergio, pero en la intimidad es especial.
Mil gracias por este amable comentario.
Con todo afecto mi saludo muy cordial.
Salvador.

 

Hola compañero.

Aunque no soy un tipo romántico, me parece hermoso ese tono dulce y melancólico que sabes imprimir a tus poemas.

Un abrazo.

Mouse

 

Mil gracias, querido amigo, por este comentario y por tu opinión favorable.
Con todo afecto, un fuerte abrazo.
Salvador.

 

Uno de los poemas que más me han emocionado
a los que deambulamos sedientos por tus letras
una rosa es una rosa y dios por nosotros qué lleva,
portador penitente, nuestra corona de espinas.

Encontramos este sublime canto a la vida
y a la grandeza que tiene de la gente buena.
La inconfundible voz del hombre que camina
moviéndose por el lado salvaje de la vida
en el tórrido territorio árido que hoy transita
la frontera entre la palabra hablada y la cantada
aquí tenemos entonces un ejemplo de poeta.

Muchos vieron en este proyecto una traición
quien en vida, nunca había manifestado su deseo
compañeras situaron musicalmente tus poemas.
Sea como fuere hay momentos donde la música
con la palabra se funden en un solo espíritu.

El fondo musical que acompaña el relato es exquisito
os animamos a descubrir su melodia en esta partitura
nos alegra que la hayáis seleccionado y os pongan un pisito
para glosar en este soneto el emotivo tema que os ocupa.

Está excursión al Manchester de los años 50
a través de la voz y los ojos de un anciano
sois en nuestra pequeña modesta opinión,
una de los grupos de música independiente
más infravalorados de la historia.

Llegado aquí compruebo que no ha colado
bien se nota que no es mi estilo en cada nota
perdona entonces pues tenía que intentarlo
dar jabón y vaselina pero me ha reconfortado.

3´:36´´ no esta tan mal este presente cortypego que te dedico de corazon y lo sabes, ningún animal sufrió daños durante el rodaje (salvo los que murieron a golpes, ahogados o empalados), reconoce que si me lo propongo empiezo a dar el pego apreciando como por tu comisura de la boca se te esta escapando una sonrisa tan necesaria por otra parte en estos tiempos que corremos y que tanto echamos de menos con sustancia y con el talante acostumbrado que nuestra nobleza y modestia exige. (Oración de mas 50 palabras, ole). Ya sabes que no soy malo, es solo un ejercicio, cuando el diablo no tiene que hacer, escribe palabras con el rabo pero que palabros amigo.

Textos seleccionados y cortypegados de http://www.canalextremadura.es/radio/blog/episodio-45-el-poder-de-la-palabra-canciones-habladas
Dos salimos del chozo,/tres golvimos al pueblo./ Jizo Dios un milagro en el camino:/ ¡no podía ser por menos! Por dios casi me meo, me gusta cultivar el exceso. Va por usted este ditirambo acompasado y gracioso.

 

Amigo mio, yo tampoco me considero romántico, pero me gustó mucho la delicadeza, con que describes un instante, asi como la musicalidad de tu poema.

Saludos.

 

Romántico tú, esa es buena te lo digo desde el cariño y lo sabes, yo me mato por hacer una oración altisonante y tu cortandola me la tiras por los suelos.

Sabías que Nietzsche tenía por costumbre hacer oraciones de 48 palabras y Adolfo Hitler de 52, que lo sepas.
Recibe con esta advertencia mi max profunda irreverencia.

 

Amigo Fulgencio, si he tardado en contestar, es porque aún estoy tratando de digerir tu comentario. Si tuviera que describirlo con una palabra, sería "tristeza".
No entiendo nada de nada, ya sabes, diferencias culturales.
Mi único pecado ha sido leer un poema y comentarlo, creo que tengo el mismo derecho que tú, aunque las formas no sean las mismas.
No entiendo qué he tirado por los suelos. Siempre te he considerado un amigo, y como tu dices "y lo sabes".
Me pierdo intentando descifrar el porqué de tu malestar.
...Lo de advertencia ¿que es? ¿debo esperar a los hombres de negro?
"recibe mi max prufunda irreverencia"...como no me lo aclares...
creo que la irreverencia la estamos cometiendo los dos, con el autor del poema, al fin y al cabo este es su espacio.

Lo de Nietzsche y Hitler no me interesa, sabes lo que pienso de la historia, siempre la escriben los ganadores.

Por mi parte...cambio y corto.

 

Amigo callejero me alegro comprobar que aun puedo engañarte, que aun no me conoces y eso que estuviste a punto de pillarme.
Irreverente es una parodia de una coletilla con la que suelo despedirme, por eso no entiendes nada de nada.
"Recibe con este abrazo mi mas profundo barrigazo".

La historia será generosa conmigo, puesto que tengo la intención de escribirla .-Winston Churchill. La historia no se gana, se la vence porque nadie va a ganar en esta guerra.

 

Pues como te dije, no quiero seguir ocupando un espacio que no es mío.
Si es como dices "aquí no pasa ná".
Y como coletilla: deja el "Código Da Vinci" para Dan Browm, así nos entendemos todos.

 

¡Pero bueno, querido amigo Fulgencio, sí que te has esmerado en este extenso comentario! Sabías perfectamente que me iba asomar una sonrisilla. Me ha gustado mucho todo lo que me dices, amigo mío, lo cual te agradezco de corazón. Muchas, muchas gracias por todo tu tiempo y tu consideración.
Un abrazo fuerte.
Salvador.

 

Muchísimas gracias, querido amigo, por este acercarte a mi espacio y dejar tu valiosa huella. Celebro que este tema haya resultado ser de tu agrado. Resulta que, efectivamente, se trata de instantes reales y de las sensaciones que me producía la sorpresa de ver una rosa abierta en un rosal que hay por el jardín de mi casa, siempre he visto algo de trascendente en estos pequeños acontecimientos.
De nuevo, muchas gracias por tu presencia amable.
Con un abrazo afectuoso.
Salvador.

 

En cada despertar se abre la rosa de un nuevo día, una nueva flor para disfrutar en el tiempo brevísimo que nos regala su belleza.
Me ha gustado mucho tu poema, Salvador y la espiritualidad de su perfume.
Saludos

 

Tú, Salvador, lo ves desde el punto de vista del placer cautivador gozoso pero yo veo una rosa como el ángulo de sus pétalos en taxia que al tenerlos tan apretados seguro que estará en unos 132 grados, por supuesto poético pero mucho menos cautivador y no te aburro con sus nastias, neuralgias je, je y tropismos, diríase que las rosas tengan una especie de sistema nervioso, eso me hace pensar si son familia de los tulipanes que menudos son en cuanto a fobias. En eso de no analizar me ganas pero una vez con el número áureo tal vez creí ver a dios, que tu lo dices mejor
sorprendente matiz del nuevo día./ Y fuera que en la hondura de mi abismo/ oí como un mensaje de Dios mismo/ pues solo para mí la flor se abría. pero tendremos que tener cuidado no nos tengan por iluminados por ver a dios en cualquier cosa aunque en eso te gano tambien lo veo en las cosas feas.

 

Me encantó, esa flor milagrosa que solo se abre para ti. Felicidades por tan bello poema Salvador.-

 

Muchas gracias, querida Maygemay, por acercarte y dejar este amable comentario en mis letras. Celebro hayan resultado de tu agrado.
Afectuosamente un saludo muy cordial.
Salvador.

 

Un placer, estimada Ligia, es encontrarte en este espacio. Mil gracias por el amable comentario que me dejas y por la lectura también amable.
Te envío mis afectos junto con un saludo muy cordial.
Salvador.

 

Muchas gracias, querido Fulgencio, por volver a este espacio y dejar esta nueva huella.
Con todos mis afecto, un abrazo.
Salvador.