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Su cara (ovillejo)

La miro y siento su olor,
color,
cuando su mirada torna,
que adorna
aquello que no cambiara,
su cara.
Era pues quien la pensara
cuando entre flores anduvo,
porque su faz siempre tuvo
color que adorna su cara.

¿Por qué están algo asustadas?
Miradas.
¿Temen a sentir dolor?
De amor.
¿Y se alejan divididas?
Perdidas.
Por su aroma sostenidas
regresaron a mi lado,
habiendo recuperado
miradas de amor perdidas.

¿Es que os parecen pequeños?
Mis sueños.
¿O me sentís incapaz?
De paz.
Están llenos de calor
y amor.
Se engrandecen de color
en tiempo de Navidad,
encienden la oscuridad
mis sueños de paz y amor.

Te dije un adiós sincero,
tu vuelta estoy esperando,
porque nunca sabré cuando
pase el tiempo que te espero.

Y me quito hasta el sombrero,
y te seguiré llorando,
pues mientras te siga amando
seré tu fiel prisionero.

No sabes cuánto te quiero
y deseo estar contigo,
vuelve pronto, que te espero,

no digas que soy tu amigo,
que mi amor es verdadero,
no puedes jugar conmigo.

Un adiós que asoma triste,
te fuiste,
pesada carga que llevo,
de nuevo,
que me inunda de dolor,
amor.
Me deja muy mal sabor
tenerme que despedir
no sé si podré vivir…,
te fuiste de nuevo amor.

​

Perdí lo que nunca hubiese querido,

¿a caso tú me has amado más que yo?

Beso el umbral de lo desconocido,

parte de otra parte que nos olvidó,

absurdo eclipse que forma el olvido

de dos almas que murieron de amor,

es imposible encontrar el camino

ni borrar la huella que el suelo pisó,

mas mi amor sigue todavía vivo

pensando que amarla fue lo que triunfó.​

…Sola…​

No sé si sabes mi vida
qué vive bajo mi sombra;
mi alma se quedó cautiva
en la cárcel de tu gloria.​

En el aire se respira,
de tu quietud, el aroma,
aquel que perdí un día
cuando buscaba amapolas.​

Aunque tanto te quería
te fuiste como las olas,
y mirando al mar sentía
que mi alma quedaba sola…​

​

Eres la brisa
del aire que respiro,
suave abanico
de tus dulces sonrisas,​

eres caricia en mi semblante,
rumbo que me lleva a ti
en mi esforzado vivir,
aunque ya no deba amarte...​

Así eres, frágil mariposa
que la arrastra el aire,
bella e inestable,
pero la más hermosa.​

¿Sabes lo que quiero amor?​

Un lago de agua clara,​

transparente y cristalina,​

que la muevan un poco​

suaves vientos o brisas,​

rodeado de árboles,​

verdes prados y flores,​

que el volar de las aves​

lo adornen​

y lo llenen de colores.​

Desearía, entonces,​

arroparme entre tus brazos,​

sentir tu delicada piel,​

que tu aroma​

rozase entre suspiros,​

que no evadan las sombras,​

mi corazón enamorado,​

quedarme inmerso en ti,​

sentir tus sedosas caricias,​

suaves y delicadas,​

y escuchar tu voz,​

dulce como tus miradas,​

tierna como un arrullo,​

vivir esa calma llena de paz,​

disfrutar ese amor​

tan tuyo y tan mío,​

y quedarnos unidos​

para siempre en la vida,​

haciendo el mismo camino.​

¡Qué hermoso es mi lago​

cuando te tengo cerca,​

cuando estás conmigo...!​

A mis amigos​

Llego de una larga penumbra,​

un recorrido oscuro, sufriendo,​

batallando cada día con la luna, ​

perdido prácticamente en el tiempo.​

Llego después de haber vencido​

las sombras del sufrimiento,​

el dolor que me guardaba el destino​

fue peor que el peor sueño.​

Llego con espíritu agradecido,​

pues la normalidad a mí ha vuelto,​

y todo lo que he sufrido​

borrado está del pensamiento.​

Llego de nuevo a casa,​

me alegra volver a veros,​

ya tenía muchas ganas​

de deciros cuánto os quiero.​

Amigos todos…​

amigos míos…​

gracias por vuestro apoyo​

que de tanto me ha servido,​

gracias por no dejarme solo,​

por suavizar mi camino,​

sois el mejor tesoro​

que nunca haya conseguido,​

brindo por todo y por todos,​

…mis verdaderos amigos…​

Dedicado a todos los Poetas del Portal y, especialmente,
aquellos poetas que no han dejado de enviarme sus mensajes
e interesarse por mí durante mi larga ausencia.
El motivo que me forzó a dejar el Portal por tanto tiempo
está, afortunadamente, felizmente solucionado.
Con todo mi cariño y agradecimiento para todos​

Raúl​

Te escribiría un poema…,​

si mi mente estuviera clara,​

si mi corazón no sufriera,​

si este calvario terminara…​

Te dedicaría unos versos​

inspirados en tu mirada,​

que arrastrados por el viento​

llegasen a tu morada…​

Te llenaría de besos,​

de esos que llegan al alma,​

y en ese mágico sueño​

acariciaría tu cara…​

Escribirte ahora no puedo,​

no tengo la mente clara,​

me invade el sufrimiento​

y tengo encogida el alma…​

Me acomodé a tu ausencia,​

al paso del tiempo sin ti,​

a respirar el aire sin tu aroma,​

a no escuchar tu voz​

ni ver tus sonrisas.​

Me acomodé a no sentir tus caricias,​

a tener el corazón seco de amor,​

a no sentir tus besos,​

aquellos que salían de la caricia​

de nuestros labios…​

Sí, me acomodé a no tenerte a mi lado,​

a que ya no seas mía,​

a no ver tus miradas​

ni sentir el calor de tus manos,​

¡a tenerte lejos…!​

Me acomodé a vivir así,​

aliado contra el tiempo y la distancia,​

enemigos eternos​

que no logro vencerlos,​

y cada día tratan de recordármelo.​

Me acomodé, sí, me acomodé,​

pero no me acostumbré a olvidarte,​

no puedo dejarte salir de mi corazón​

ni puedo dejar de pensar en ti…​

…No puedo dejar de amarte…​

​

Eres tú mi bella rosa,
de suaves y delicados pétalos,
la que, con su aroma,
mantiene vivos mis sueños.
Eres una mirada hermosa,
una cálida brisa del viento,
una caricia en tu boca…
…un sublime beso…​

No me olvides,
me pediste,
no te olvido vida mía,
no podría mi corazón,
formas parte de mi vida,
como los pétalos, forman parte de la flor.​

Eres la savia que recorre mi cuerpo,
estás incrustada en mí,
me das la fuerza y aliento
que necesito para vivir.
Dime… ¿cómo olvidarte puedo?
¿cómo olvidarme de ti?​

Tú, que eres mi sueño,
tú, que vives en mis sentidos,
eres mi amor en mi cielo,
mujer que siempre he querido,
olvidarte yo no puedo,
sólo olvidaré al olvido…​

No quiero que me faltes nunca,
no puedo soportar la idea,
soñando sigo en mi mundo,
mi esperanza no flaquea,
pues el amor verdadero,
por muy raro que parezca,
es constante, es eterno,
por la puerta del corazón entra,
mantiene la vida en un sueño,
no hay nada que vencerlo pueda,
es esperanza, es remedio,
no desfallece, siempre espera,
así es como lo siento
lejos de mis quimeras,
si tú me faltas primero
¿de dónde me saldrá la fuerza
para continuar viviendo?​

¡Oh, amor! Prometo no faltarte nunca,
prométeme que tú también lo harás,
que nuestras almas esperen juntas,
que juntas las dos se irán,
seguiremos las mismas rutas,
llegaremos juntos al mismo lugar,
comeremos de las mismas frutas,
que unidos nos mantendrán,
sortearemos caminos, montes, grutas,
y nuestros corazones… unidos llegarán…​

Tú me esperas… yo te espero…,
nuestros pensamientos nos unirán,
nadie marchará primero,
ambos lo haremos por igual,
esto es lo que te prometo,
mi corazón siempre te amará,
en mi mente, en mis adentros,
tú siempre en mí vivirás…​