La Tarde del Adiós.

Uno se queda solo en una plaza quieta,
enmudecen los autos tras las paredes viejas.
Las alas de paloma se vuelven de papel
las campanas son sólo cobre muerto.

La tarde del adiós lo llena todo:
rezumban los oídos
y la vista se opaca,
se borran las siluetas
y las calles se pierden,
no existe algún mañana
ni siquiera una espera.

La tarde del adiós
entumece los huesos
paraliza la sangre:
vuelve de losa el pecho.

 

Inacabable tarde, un destierro del corazón, lacerante el desencuentro... el desamor.
Me gustó, aunque quizás algunos pasajes suenen un poquito forzados.

Un placer leerte, un abrazo
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[FONT=Book Antiqua][SIZE=3]Natu.-[/SIZE][/FONT]

 

La tarde del adiós es el preludio de la nostalgia entre las carnes, que nos roba hasta el aliento.
Precioso tu poema Melquiades .
Un placer pasar por tan bellos y a la par tristes versos.
estrellas para ellos y besos con respeto y admiración para ti.

 

ç

Gracias por la visita.
Abrazos.

 

Saludos poetisa.
gracias por el comentario

 

La tarde del adios, esa que deja huellas inborrables
y perdura atraves de los recuerdos.
Un gusto leerte,saludos.
ANAMAR

 

Entre las muchas muertes siempre un entorno para sentirlas...y lo has logrado en su máximo punto.

Siempre te leo y te admiro Melq.

 

Se queda siempre..
Abrazos, gracias por leer.

 

Gtacias tuti. Un placer saber de tu presencia.
Abrazos.

 

alguna vez escribí estos versos que asimilo a tu excelente poema:

"Mar enfurecido de incomprendidas olas,
corrientes de alimento y hostiles lamentos
vanos suelos subterráneos de sentimiento."

mi abrazo austral

Ramiro

 

Las visiones encuentran sus ecos en nuestra propia huella.
Hermosas líneas.
Aprove cho para abrazarte y dejarte mis mejores deseos para ti y los tuyos.
Abrazo.

 

Impecable tu retrato de esa aciaga tarde. Todo descrito de la manera exacta.

Aplausos y honores a tu obra.

Saludos!