Te añoré.

Te añoré a solas
y acompañado,
te añoré siempre
y en todos lados.
Te añoré mientras andaba a solas
entre un mar de gente
que sólo hablaba
sin escuchar palabra.
Te añoré en los ojos de los niños
y en los de los animales
pensando a quién decirle
lo que me comentaban.
Te añoré pese a que caminaba,
pese a que no dejaba de moverme,
pues probé a añorarte entre otros brazos
y otras mentes,
entre otros labios
y otros quereres.
Y te añoré en los silencios,
en los no decir nada,
añoré tu palabra,
añoré tu mirada,
añoré tu sonrisa
y tu risa
y esos dos ojos inmensos
que me llenaban;
añoré el todo que me dabas
sin yo pedirte nada.
Así te añoré siempre
y en todo sitio.
¿Y sabes, amor?
Añorándote sigo.

 

las mañanas son para renacer en el sentimiento, gracias por compartirnos Odell

 

Cierto, toda mañana es un nuevo renacer.
Gracias a ti, Odell.

 

Opale, que sentimiento profundo nos compartes..
ante tus versos, hermosa inspiración
Me encanto, saludos Old

 

Muchas gracias por tu paso por mis letritas y por hollarlas, con tus palabras.
Saludos, amigo Jonher.

 

Hay amores que se añoran por siempre...
Y por siempre están en todo lo que ves, haces y vives.
Buenos versos
Saludos

 

Es que el verdadero amor, ocupa espacio, tiempo y nostalgia. Fue un gusto llegar a tu espacio de añoranza. Estrellas y abrabesos

 

Profundos, sentimentales y preciosos versos. Búscala.
Saludos de tu amigo A,G,

 

Cierto, Ro.Bass, hay amores así, que por mucho que pase el tiempo son añorados.
Me alegra que te gustase.
Un saludo.

 

Y cuando el espacio y el tiempo se alargan, sólo ocupan la nostalgia.
Es un placer que te ha gustado, Ropittella.
Abrabesos para ti también.

 

Sí, sin duda, lo peor de la añoranza es su extremo de llenarte de ella y ser ciego a los goces que aún se puedan vivir.
Trataré de no caer en esa trampa, amiga.
Un abrazo, Tig-anita.

 

Gracias por tu pasar y tus gentiles y alentadoras palabras, Alma Grande.
Un saludo, amigo.