Ese silencio...

Hoy vuelvo, fatigado peregrino
y sólo traigo que ofrendarte pueda
esta flor amarilla del camino
y este resto de llanto que me queda...

De "Vuelta a la patria"
José Antonio Perez Bonalde.
​

Ese silencio...

Ese silencio,
que existe entre nosotros
y nos acerca calladamente...

Ese silencio,
de tormentas alunadas
rotundo y permanente...

Ese silencio,
sonámbulo y profundo
que nos acerca frente a frente,
es un templo inconcluso
sereno y transparente.

Es recóndita luz
que alumbra y es cimera,
que arde y se estremece
cual solar ilusión aurera.
Es remanso que aquieta y encalma
dando sosiego al alma conturbada.

Porque si este silencio que nos acerca
llegare en algún momento a separarnos,
partiría a encontrarte a los confines siderales
y morar contigo entre almendrales.

Y con arrullos de liras y de versos
sumergirnos en cristalinos manantiales
y por senderos de auroras australes
perdernos en un solo cuerpo a cuerpo.

 

Muchas gracias, querido amigo, tenía desde hace mucho tiempo las musas dormidas, pareciera están habiendo un tímido despertar.
Un abrazo.

 

Gracias Omaris, por tus bellas palabras.
Un abrazo.

 

Gracias Naty por tus bellas palabras.
Un abrazo.

 

Establecer desde ese silencio y unas centifrugadas ilusiones para
que de nuevo renazca esa luz del amor acariciado y entregado.
me gustó. saludos amables de luzyabsenta

 

Gracias Isabel, por tus sensibles y cálidas palabras.
Tenía las musas dormidas, parece quieren despertar tímidamente.
Abrabesos, querida amiga.

 

Gracias Carlos, por tus siempre profundos y cordiales comentarios.
Un abrazo, apreciado amigo.