Romance del sueño.

Le gustaba mi tristeza
le gustaba consolarme
y yo me fui acostumbrando
a su consuelo en la tarde
Venía de seis a siete,
pero sin hacer alarde
desgranaba sus palabras
como música en un baile
y mi alma se levantaba
y daba palmas al aire.
Después dejé de estar triste,
pero no hacía desaire
cantaba sus versos viejos
en los que hablaba de nadie
eran versos de cabriolas
y de cielos y paisaje
a donde yo me perdía
en sueños por esos lares.
El sueño se fue enquistando
mas ahora el sueño me arde.​

 

Precioso

 

Sin dudas son especiales las personas que saben cultivar la empatía. Aquellas que pueden ayudar poniéndose en el lugar de los que sufren.
Siempre será un gusto leerte, Luciana.
Feliz 2024 y un abrazo.

 

Juglar, muchas gracias por tu generoso comentario. Un abrazo.

 

Querida Cecilia, poeta, muchas gracias por tu certero comentario, la amistad es un regalo generoso que merece un poema. Un abrazo y que pases un feliz año 2024.

 

Muchas gracias María por tus amables palabras. Un abrazo.

 

Es una maravilla de poema, esos que tocan el alma. Hay personas que son únicas que saben llegar a uno en el momento justo sin que se los pidamos.
Siempre es un enorme placer leer tus obras querida Luciana.
U gran abrazo y feliz 20224.

 

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