Liras ligadas logran labrar los lúcidos locos

Poder rectificar
cuando sabes que te has equivocado
se debe refrenar
el gesto acostumbrado
los mortales impulsos del pasado

 

Y si quedan temores
ya tú verás que ganas la confianza
vendrán tiempos mejores,
con la verdad te alcanza.
Nunca pierdas la fe y la esperanza.

 

Buscada la templanza,
confirmada su ausencia por deceso,
prosigue la matanza
y de pedir no ceso
la paz aunque es inútil, lo confieso.

 

Te esperaba, confieso
que en la tarde friolenta de septiembre,
con la caña en la urdiembre
pasos quedo atravieso
la tarea terminada en noviembre,​

 

Tantas felicidades
que la tarde está fría en este invierno
muchas actividades
traes en el cuaderno
que mi trabajo parece un averno.​

 

Si callo perderé
lo que siempre deseo en mis instantes
por eso lo daré
a los genios , de duros sus semblantes
y de buenos talantes.​

 

Prefiero los instantes
de silencio pasados en tus brazos
y vivir como antes
de haber sido un payaso
mi corazón rompieras en pedazos

 

Recojo los pedazos,
tal vez no pueda unirlos igual que antes.
Jugamos al rechazo
con tratos infamantes.
Ya no será posible ser amantes.​

 

Si fuésemos amantes
por un día olvidáramos las normas
ya no será como antes
nuestra amistad deformas
en un engendro extraño la transformas

 

Cuando hablas de las formas
con don de apalabrar yo me preparo
un resquicio en las normas,
una salida encaro
y me empiezo a buscar algún reparo.

(Sólo humor con intención de rimar)

 

Pues yo más bien separo
las ideas felices de las penas
y no pongo reparo
no reflexiono apenas
y apoyo aunque raras las ajenas

 

¿Porqué no la remiendas?
Tu lira, Pi Radianes.
Que acabas en "agendas"
y trastocas tus planes
de escribir una lira sin desmanes.

 

Yo tenía otros planes
quería conocerte, verte así,
vendiendo tulipanes
y ramos de alhelí,
pero tu los comprabas, para mí.

​

 

Y siguen los calores
convirtiendo en sudor este tesoro.
No son estos vapores
los que la tiñen de oro
si no su uso ilegal por lo que lloro.

 

Ahora fue que eso
que dijiste de mí pude saber
sin ningún aderezo
te burlaste mujer
ignoras la verdad por no creer

 

Una nube en la mente
obstruye la visión y lo posible
y tu imagen desmiente
el turbante invisible.
Que lo que siento es indestructible.

 

Siguen los vericuetos
intrincados y llenos de artificios
por descubrir secretos
ocultos en resquicios
detectives practican sus oficios

 

Generas los bullicios
asustando a las aves por el cielo.
Vacían los resquicios.
Tú ejerces de flagelo
provocando en la tarde gran revuelo.

​

 

La tormenta desata
su furia de animal irreverente
barre con todo y mata
Los maderos del puente
arrastra en remolinos la corriente

 

Me lleva la corriente.
Mas solo es la corriente del deseo.
Sucede el accidente
solo cuando te veo.
Entre hablarte o dejarte forcejeo.​