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  1. El jardín tropical se encuentra en un sueño mágico..
    Antes de los sonidos del día, ha llegado la paz,
    los árboles altos y lánguidos se yerguen soñando,
    las ramas de flores se doblan y cuelgan torcidas.

    Los aromas de jazmines - la luz y el marrón de las cañas,
    mil sonidos susurran a través de esas fragancias,
    los murciélagos se esconden en árboles frutales
    y los búhos revolotean alrededor de otros árboles.

    Y murmurando a través del hermoso país de las hadas,
    ondeando, está el murmullo del arroyo, oscuro y lejano,
    de suave burbujeo, y el canto del grillo en el aliento de la noche.

    La diosa de la luna llama constantemente en el cenit,
    y en el cielo plateado, dominando todo, riendo suavemente,
    inmóvil como una estrella, la cruz del sur.
    A Alde, crisantemo y José Valverde Yuste les gusta esto.
  2. Hay tres líneas que recorren los trópicos del alma :
    la línea de falla, que impide cualquier equilibrio en la vida,
    la franja a lo largo de la cual la gravedad de la tierra disminuye
    y luego esa línea de dominios volcánicos,

    desde donde el maremoto o el fuego revolotea hasta la muerte
    de esas pasiones rebeldes que nos minan.
    Y en esa línea del alma tiembla y arde y su sueño vibra :
    desaparecer en lo divino o en lo bello.

    Sigue él siendo muy terrenalmente fiel a los cráteres y
    a los valles que hacen subir y bajar islas y delfines y que
    silencian por la noche meteoritos convirtiéndolos en estrellas
    de mar o hacen brillar la cima del Ërebus en un polo invernal.
    Pero cuando la gravedad en sus sentimientos se hace más ligera,
    un verso se eleva o arde hacia arriba y lo convierte en poeta.
    A Khar Asbeel, crisantemo, Alde y 1 persona más les gusta esto.
  3. Allí, donde las palomas arrullan al mediodía,
    - llamando al anhelo que anhela el corazón -
    el final toca los contornos más brillantes
    de los árboles altos,donde la sombra llama.

    Un camino ancho, sobre el que los tamarindos
    cuelgan sus bellos amantes, extiende su avenida
    cerca del mar. Allí los vientos azules florecen
    y se acurrucan contra las rocas.

    Y allí el tiempo levanta sus lentos arrecifes
    y canta el oleaje apagado del mar.
    Hasta que de repente la hora comienza a vivir,
    luego la marea sube y el oleaje avanza furioso.

    Y al sonido de mil alas de murciélago,
    de pronto la noche cae sobre todo.
    Una brisa cálida sopla los cielos lánguidos.
    Un rayo se vuelve azul. Las olas rugen suavemente.
  4. El pueblo está durmiendo. Los fuegos
    han sido extinguidos. Un rasro de humo
    aún flota bajo los árboles.
    Hoy creyó él en la suerte.
    Cuán dolorosamente muere el corazón
    en los sueños.

    El camino está tranquilo. Los tamarindos
    oscuros curvan una cúpula en noche templada.
    Allí el anhelo sólo puede encontrar anhelo:
    un solo ser humano, solo y en espera.

    Y lentamente va, hasta que de pronto sucede :
    una débil ráfaga de viento desde la quietud,
    de modo que de repente la noche huele a flores,
    impresionante, la belleza de los nardos.
  5. Bajo el velo que la luna extiende sobre el mundo,
    en el crepúsculo de la noche, ella está en su puerta.
    Qué la llamó allí? Fue el delicado aroma de la tierra
    silenciosa y lejana?

    El velo que cubre su castidad durante el día cuelga
    junto a su cama ahora que está sola y sin ser observada,
    qué la llamó de su sueño, fue el junco que susurraba
    en la brisa como una risa divina?

    Ella permanece quieta y firme, intacta, donde sólo la luz
    de la luna se acurruca alrededor de sus extremidades,
    ella permanece el el umbral, incapaz de salir, aunque
    dentro de ella ha surgido una inquietud sin precedentes.

    Así se yergue ella, una figura de bronce, bajo la majestuosa luz,
    a través de sus delgados miembros fluye una leve vacilación,
    levanta sus manos hacia la luna - una suplicante que en su
    impasibilidad se rinde a la deidad.
  6. La noche llega sigilosa con guitarras
    bajo el circular plateado de la luna,
    las palmeras temblorosas se yerguen
    cerca del río como cuerdas de abeto.

    Entonces la noche juega y tiernamente
    las cosas cantan, susurrando suavemente,
    sopranos de cigarras, queja de nostalgia
    en la pluma de la palma.

    La noche canta por la ventana abierta,
    canción vibrante de antaño,
    el corazón deja intacto sus años,
    se detiene en un nombre no escuchado

    y busca perdido aquel canto
    en las paredes de la habitación
    de cuando él era arpa y sus manos tocaban
    una pequeña música nocturna.
  7. La tierra brilla febrilmente y las aves migran,
    en vano la pradera y el bosque invitarán a quedarse;
    ninguna canción puede cubrir las ramas con verdor joven
    ningún nido de flores puede dar al huerto.

    revolotean, cantan con sonidos de violín
    tropas cerradas y cuñas afiladas,
    ejército inspirado presionando hacia el sur,
    donde yacen los patios abiertos de su nostalgia.

    En el corazón! tú llevas el mismo coraje,
    no tardes cuando las hojas caen y el fruto se vuelve rancio.
    Oh, ruiseñor, el viento y el tiempo te perseguirán
    hasta el fin, si no huyes.

    Extiende tus plumas, concede tu deseo a aquellas regiones
    donde los rayos del sol rompen en joyas sobre los corales
    y las plantas minerales,
    y cuando por las noches las estrellas bromean con el loto.
    A NUBE ATARDECER, Khar Asbeel, Alde y 2 otros les gusta esto.
  8. A veces debemos imaginar
    que sufrimos un dolor inveterado :
    es demasiado profundo para las lágrimas,
    no encuentra forma ni canción.

    El susurro de los árboles
    no te libra de su hechizo,
    ningún sol sobre arroyos plateados
    puede vencerlo.

    Ni el amar, ni el escuchar
    de lo que es tan encantador :
    el susurro tranquilizador de
    la cálida palabra humana;

    entonces sólo resulta reconfortante
    ese manantial de sonido,
    en una sala luminosa,
    donde el coro de instrumentos
    nos canta en su lengua,

    y donde un gran narrador
    cuenta cómo vio el resplandor
    de la luna de Mahler,
    la noche estrellada de Bach.
    A NUBE ATARDECER, crisantemo y Alde les gusta esto.
  9. Entre las paredes de roca con musgo goteante,
    el agua cristalina se precipita imprudentemente
    en el lago arremolinado, niebla y crepúsculo,
    la luz de la luna penetra en el bosque que se aleja,
    juega riéndose con las cascadas espumosas,
    acaricia la cara húmeda de una piedra rodante
    y los esbeltos helechos que bañan su cabello;
    las lianas sueñan con el vestido nocturno
    de mil estrellas titilantes.
    Exiliado que tiene que dejar esto atrás
    en la joya del Sur de antaño,
    bajo un cielo nublado en calles grises.
    No hay luna brillando sobre el lugar actual.
  10. La luna se eleva más alto,
    soñadora enamorada,
    para descansar en la noche azul.
    Una suave ráfaga de viento
    besa el espejo blanco del lago,
    que ahora ríe melodiosamente
    en un susurro.
    Oh armonía cuando dos se
    pertenecen el uno al otro,
    creada para la unidad de su todo.
    Lamentablemente lo que nace
    para unirse rara vez se encuentra
    en este valle loco.
  11. Dibujo y pinto palabras en mi nostalgia.
    Un campo de juncos ondea como un mar, y
    hilos de perlas de rocío permanecen en las hojas.
    Mis palabras brillan en el papel blanco
    como flores de ciruelos arrastradas por el viento
    en la nieve.
    Me pregunto, cúanto tiempo se puede conservar
    el dulce aroma a mandarinas en la axila?
    Cúanto tiempo brilla la nieve bajo el sol y la luna?
    Sólo esta composición de mis pinceles :
    oh, que dure para siempre, para siempre.
    A NUBE ATARDECER y Alde les gusta esto.
  12. Se llama vida a un sonido que golpea,
    a una palabra, a una imagen,a un sentimiento
    que me alivia del giro
    de las estrella y de los días :
    está en antiguas canciones y leyendas
    en fuentes de luz, flores y estaciones,
    en una boca, suave al besar,
    en un grito de pájaro, en un soplo del viento.
    A veces, de tarde srde con resplandor indoloro,
    resuena en el valle de plata, el fiel ganado,
    las aguas y las montañas se hunden
    con silbido en una horma cálida,
    en la que se mueve el fruto,
    que pronto dará nueva vida a un grito.
    Luego estalla en una llama berbellón de deleite,
    sobre labios salvajes, los tartamudos caminan
    como el sonido primaveral entre las cañas
    de la orilla, la hierba del órgano,
    la canción que nunca se canta del todo.
  13. La noche, como un pájaro que ha regresado,
    pasa silenciosa y enamorada más allá de la luna,
    y los primeros que han traído consigo el impulso
    quedan conmovidos en la oscuridad.
    Incluso antes de la magia de los árboles en flor,
    comienzan los profundos susurros que surgieron
    mucho antes en los sueños confusos en anticipación
    solitaria.
    Aquellos que estaban separados unos de otros,
    que no se percataban de lo inestable que es todo
    en la vida,
    de lo inestables que eran ellos mismos en sus sueños,
    esta noche vuelven su rostro sin amor.
    La luna se aleja y deja oscura la sombra del desencanto
    sobre tantas bocas.
    A NUBE ATARDECER, Ansel Arenas, Alizée y 2 otros les gusta esto.
  14. Qué se esconde entre los arbustos oscuros,
    detrás de los setos floridos, en los jardines y terrazas?
    Tal vez el rostro frío y deseoso de besos y
    el cabello alborotado por el viento
    después de ráfagas tranquilas.

    Tal vez deslizando las manos de manera fragante,
    sobre la niebla baja y las túnicas frescas,
    alrededor de un murmullo más duradero
    de un ritmo, que se convierte en un ondular más puro.

    Tal vez la alta silueta bajo los abedules,
    todo suavemente plateado y soberano,
    alrededor de la cual se encuentran círculos
    encantadores de visiones jóvenes y alas torcidas.
  15. Sabía que ya no estaba sola.
    Fue el viento que corría entre la hierba de las dunas?
    Fue la gaviota que me llamó desde lejos sobre el espejo del cielo?

    Nada llena tanto la naturaleza como lo que, esperado,
    da forma a mi corazón,
    flota alado sobre blancos collares de agua y
    se desliza hacía mí como una fina queja.

    Porque dentro está el movimiento del viento
    sobre las nubes, las alas y la marea,
    del oscuro anhelo, del brillo secreto -
    incluso para aquellos que están solos, amados.
    A NUBE ATARDECER, Khar Asbeel y Alde les gusta esto.